19/01/2025
03:43 AM

Cosecha de algas, una forma de vida para jóvenes desempleados

Un grupo de jóvenes ceibeños se han dado a la tarea de recolectar algas marinas comestibles, las que posteriormente venden para ganarse la vida. La recolección de algas se ha expandido en los últimos años en todo el mundo.

La Ceiba, Atlántida

La falta de un empleo ha obligado a un grupo de jóvenes ceibeños a buscar nuevas formas de ganarse la vida y de llevar dinero a sus hogares.

Estando en la playa de Los Maestros de La Ceiba, Atlántida, se dieron cuenta de que en el mar había una mina que explotar y se les ocurrió recolectar algas marinas comestibles para luego venderlas.

El difícil acceso priva de otras hermosas playas en Atlántida

En el litoral Atlántico hay empresarios de la pesca que compran este alimento, el cual no es muy usual su consumo en esta región.

La recolección de algas se ha popularizado en los últimos años en todo el mundo, y su consumo se ha expandido debido a los beneficios que tiene para la salud.

Las algas marinas son parecidas a los espaguetis y tienen un sabor suave y son ligeramente saladas. Existen una variedad de algas y cada una con un sabor diferente, se puede preparar cocidas con otros vegetales y carne, mayormente de pescado o pueden freírlas de manera independiente.

De manera rudimentaria, estos hombres se sumergen unos diez pies al lecho marino, únicamente con una máscara para observar mejor en la profundidad y un saco para guardar lo recolectado.

Hace un mes comenzaron la labor de recolección de algas, práctica no muy usual en el país. Su labor está condicionada a la calidad del agua, si el mar está sucio por la caída de lluvia o la marea está muy activa y alta deben cancelar la extracción.

En el mar frente a la playa de Los Maestros en La Ceiba, existen una gran variedades de algas marinas comestibles. La extracción de algas se ha expandido en el mundo.

Las algas crecen en agua dulce y salada. “Cuando el mar está limpio siempre venimos, pero cuando está sucio no podemos hacer nada y nos retiramos. El primer paso es meternos al mar y sacamos las algas, luego las ponemos a secar”, apuntó Fedal Mena.

La playa conocida como Los Maestros en La Ceiba es la zona donde se halla la mayor cantidad de este alimento marino. “Aquí hay bastante alga y rápido llenamos un saco, es un regalo que el mar nos da”, agregó Mena.

En un mes han logrado extraer unos treinta sacos, cada saco se los compran a unos 100 lempiras. Una vez que extraen las algas marinas, los jóvenes proceden a limpiarlas en la playa y las dejan por un tiempo para que sequen. “No nos cuesta mucho sacar las algas cuando el mar está limpio, en dos minutos ya tenemos un saco”, puntualizó Mena.

Autoridades de organismos de socorro recomendaron a las personas que han iniciado esta práctica de recolección de algas marinas, que tomen las medidas de seguridad para evitar accidentes en el mar.

Además, sugirieron que solo deben recolectar donde hay algas en abundancia y extraer una cantidad pequeña para dejar que sigan desarrollándose. También recomendaron no arrancar las algas de las rocas, sino de la parte de encima.