Expertos demandaron este jueves transparencia en el proceso de elección del nuevo fiscal general y adjunto de Honduras e instaron al Parlamento a elegir a los candidatos sin injerencia política y que cumplan con los requisitos de idoneidad, honorabilidad, capacidad profesional.
El ex relator especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) Edison Lanza dijo a EFE que espera que el proceso de elección se lleve a cabo bajo estándares de “transparencia, participación y observación”.
El Parlamento hondureño debe tomar en cuenta el perfil técnico y la probidad de los candidatos al momento de elegir a las nuevas autoridades del ente de investigación, señaló Lanza, que integra una Misión Internacional de Observación (MIO) que llegó hoy al país para observar el proceso.
Los nuevos fiscales van a “dirigir una maquinaria que es central para la lucha contra la impunidad y la corrupción” y debe “responder a las necesidades de las demandas de la población”, enfatizó el experto en el marco del foro “Elección de altos fiscales en Honduras”, celebrado en Tegucigalpa.
El Parlamento de Honduras recibió el martes una lista de cinco nominados para elegir al nuevo fiscal general del país y el fiscal adjunto, que fueron seleccionados por una junta proponente.
El ex relator de la CIDH instó a los diputados hondureños a no elegir al nuevo fiscal general y adjunto por “su afinidad con un partido político”.
Aseguró que la elección de las nuevas autoridades del Ministerio Público supone “un paso fundamental para la reinstitucionalización democrática, la lucha contra la corrupción y el reencauzamiento de una justicia que responda a los intereses del pueblo hondureño”.
INDEPENDENCIA DEL SISTEMA DE JUSTICIA
El secretario ejecutivo de la MIO, Jaime Arellano, dijo a EFE que el Ministerio Público es la “puerta de entrada” al sistema de Justicia al momento de investigar delitos económicos y de corrupción, entre otros, por lo que sus autoridades deben tener independencia.
“Un sistema de Justicia que no es independiente, no garantiza a hondureñas y hondureños que este sistema de Justicia va a responder a criterios objetivos en la investigación y persecución del delito”, señaló Arellano.
La ciudadanía de Honduras tiende a “desconfiar” del Ministerio Público debido a que sus máximas autoridades están “muy ligadas al poder político”, por lo que es importante que el nuevo fiscal general y adjunto sean “independientes” de todo tipo de poder, destacó.
Arrellano cree que la independencia de los nuevos fiscales “es lo único que puede garantizar que se realicen las investigaciones que se deben hacer en materia penal y, por otro lado, no se use la Fiscalía (Ministerio Público) para perseguir a los opositores políticos”.
El actual fiscal general de Honduras, Óscar Chinchilla, y el adjunto, Daniel Sibrián, concluirán su segundo mandato el 1 de septiembre próximo.
El Parlamento hondureño tiene “una responsabilidad muy importante” en la elección del nuevo fiscal general y adjunto, apostilló Arellano, quien considera que los diputados deben elegir a las nuevas autoridades del Ministerio Público sin considerar la “cercanía política” de los nominados.
La MIO solicitó a las fuerzas políticas que asuman con responsabilidad la elección de los altos fiscales y actúen con “diligencia y respeto” hacia la institucionalidad democrática. EFE