Río de Janeiro, Brasil.
El Gobierno brasileño manifestó su apoyo a la decisión de las autoridades de Honduras de recontar los votos de las pasadas elecciones presidenciales e instó a la población a aguardar con paciencia y a los candidatos a llegar a un acuerdo en el que se comprometan a aceptar el resultado.
'El Gobierno brasileño recibió con satisfacción la noticia de que el Gobierno de Honduras y el Supremo Tribunal Electoral del país decidieron recontar los votos de las recientes elecciones presidenciales para dirimir cualquier duda sobre la lisura del pleito', según un comunicado divulgado anoche por la cancillería.
En la nota del Ministerio de Relaciones Exteriores, Brasil 'exhorta a la población a aguardar pacientemente el final del recuento y a los candidatos a llegar a un acuerdo para aceptar el resultado que cuente con legitimidad y apoyo popular'.
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Brasil aprovechó el comunicado para reiterar su compromiso con la democracia en América Latina y el Caribe y su apoyo al trabajo, los informes y las recomendaciones de la Misión de Observación Electoral de la Organización de los Estados Americanos (OEA).
Brasil se sumó así a los Gobiernos de Argentina, Chile, Colombia, Guatemala, México, Paraguay y Perú que ayer declararon su apoyo al recuento de la totalidad de las actas electorales interpeladas.
Estos 7 Gobiernos también defendieron el informe preliminar de la Misión de Observación Electoral de la OEA que llama a un acuerdo 'legítimo' entre los principales candidatos, el presidente Juan Orlando Hernández y el opositor Salvador Nasralla.
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Los comicios recientes, en los cuales los hondureños votaron el 26 de noviembre por un presidente, tres vicepresidentes, 128 diputados al Parlamento, 20 al Centroamericano, y 298 corporaciones municipales, fueron inundados de dudas, reclamos y manifestaciones de opositores y oficialistas, luego de una semana de ausencia de resultados.
Nasralla y Hernández se declararon presidente electo el mismo día de los comicios, lo que creó incertidumbre y ha desembocado en violencia en el país centroamericano, donde no hay segunda vuelta y gana el candidato que tuvo más votos.
Las manifestaciones derivadas del presunto fraude, algunas con actos de vandalismo, han causado cerca de una veintena de muertos, decenas de heridos, más de un millar de detenidos y millonarias pérdidas económicas, según diversas fuentes. EFE
