En medio de una crisis de empleo que afecta a miles de hondureños, el gobierno de la presidenta Xiomara Castro decidió poner fin al programa presidencial “Con Chamba Vivís Mejor”.
Este programa, que por una década proporcionó financiamiento a la empresa privada para la creación de empleos, fue oficialmente liquidado el pasado 6 de agosto mediante el PCM 22-2024, publicado en el Diario Oficial La Gaceta.
El decreto que suprime el programa, creado durante la administración del expresidente Juan Orlando Hernández (ahora preso en Estados Unidos por narcotráfico), establece en su artículo 1 la “liquidación operativa, administrativa, financiera y presupuestaria” del mismo, así como de sus activos y pasivos. Se ordena que todo este proceso se realice de manera eficiente y ordenada.
Críticas
La decisión ha generado críticas por parte de expertos, quienes consideran que eliminar un programa que generaba empleo no es una medida oportuna en un país con altas tasas de desempleo.
Eduardo Facussé, presidente de la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC), expresó que aunque programas como este no son la solución definitiva, “todo se necesita para crear empleo”.
Facussé destacó la importancia de enfocarse en sectores clave como la agricultura y la manufactura, subrayando que es “inconcebible” que Honduras aún importe alimentos básicos como el maíz, frijol y arroz, teniendo los recursos para producirlos localmente.
Según la CCIC, entre 2023 y 2024 solo se crearon 77 empleos formales netos, pero hasta julio de 2024 la cifra alcanzó los 9,000 nuevos empleos.
Sin embargo, Honduras necesita generar 120,000 empleos anuales para cubrir el déficit. Para Facussé, la falta de empleo está vinculada a la falta de confianza para invertir, especialmente en sectores productivos como la agricultura, construcción y manufactura.
Por su parte, el expresidente del Colegio de Economistas, Rafael Delgado, opinó que aunque el programa “Con Chamba Vivís Mejor” no era crucial, debió mantenerse hasta que el gobierno desarrollara políticas más sólidas para generar empleo.
Delgado explicó que el programa era una forma de subsidio al empleo, que fue mal gestionado y, por tanto, perdió su efectividad.
Durante su existencia, el programa benefició a 200,000 personas de forma directa, una cifra que los analistas consideran insuficiente dado el contexto de desempleo en el país.
Cómo funcionaba “Con Chamba Vivís Mejor”
El programa buscaba proporcionar empleo a 100,000 personas en un período de cuatro años, generando 25,000 empleos por año.
Para incentivar a las empresas, se ofrecía un beneficio económico equivalente a la mitad del salario mínimo vigente por cada empleo creado, cubriendo los tres primeros meses: dos meses como subsidio para capacitación y uno como incentivo por la permanencia del empleo.
También pretendía fomentar la inserción laboral de sectores vulnerables, así como el desarrollo de microemprendimientos para generar nuevas fuentes de trabajo.
