San Pedro Sula, Honduras.
Menos de una hora duraron abiertos los portones de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras en el Valle de Sula (Unah-vs) ayer al intentar reanudar las clases.
Aunque más de 20 agentes de la Policía Nacional custodiaban las instalaciones, una veintena de estudiantes encapuchados se tomaron los edificios para luego proceder a cerrar la universidad por completo.
La situación no fue del todo pacífica ayer, pues al tratar de completar la toma en la entrada peatonal, algunos de los encapuchados lanzaron piedras a los uniformados que se encontraban ahí. Los agentes policiales optaron por retirarse hacia las glorietas que se ubican frente a la Unah-vs.
Por disposición de las autoridades universitarias, el personal de mantenimiento había retirado en la madrugada el portón de ingreso vehicular del centro con el objetivo de evitar el cierre.
Sin embargo, los estudiantes rápidamente armaron una barricada con pupitres, cercas y otros materiales para sellar el acceso e impedir que una minoría de estudiantes que sí deseaban clases ingresaran.
Con el transcurso de los minutos fueron llegando más jóvenes vestidos con camisas negras, y alrededor de las 10:00 am se convocó a una asamblea informativa en el área interior del portón de ingreso.
Alrededor de 800 estudiantes se congregaron para escuchar las propuestas de quienes pasaban a expresarse frente al micrófono. A petición de la mayoría, se acordó una nueva toma indefinida de las instalaciones al ritmo de aplausos y entonaciones satíricas contra la rectora Julieta Castellanos.
“Hemos retomado la lucha y nos hemos unificado. Son 75 requerimientos fiscales, y los acusan del delito de sedición. De esta cifra, 24 son estudiantes de la Unah-vs. El delito de sedición es algo grave y hasta los Derechos Humanos están preocupados por esta acusación que hacen. Queremos cese a los requerimientos. Sabemos que necesitamos las normas, pero el proceso está viciado. Urge construir unas nuevas; queremos proponer esto en el diálogo. Si nos reprimen aguantaremos hasta donde podamos”, expresó un líder estudiantil que omitió su nombre.
El director de la Unah-vs, Francisco Herrera, compareció nuevamente ante los medios de comunicación e hizo el llamado a los protestantes a dialogar de manera seria y razonable.
Menos de una hora duraron abiertos los portones de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras en el Valle de Sula (Unah-vs) ayer al intentar reanudar las clases.
Aunque más de 20 agentes de la Policía Nacional custodiaban las instalaciones, una veintena de estudiantes encapuchados se tomaron los edificios para luego proceder a cerrar la universidad por completo.
La situación no fue del todo pacífica ayer, pues al tratar de completar la toma en la entrada peatonal, algunos de los encapuchados lanzaron piedras a los uniformados que se encontraban ahí. Los agentes policiales optaron por retirarse hacia las glorietas que se ubican frente a la Unah-vs.
Por disposición de las autoridades universitarias, el personal de mantenimiento había retirado en la madrugada el portón de ingreso vehicular del centro con el objetivo de evitar el cierre.
| La asamblea estuvo concurrida por alumnos de todas las carreras del centro.
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Con el transcurso de los minutos fueron llegando más jóvenes vestidos con camisas negras, y alrededor de las 10:00 am se convocó a una asamblea informativa en el área interior del portón de ingreso.
Alrededor de 800 estudiantes se congregaron para escuchar las propuestas de quienes pasaban a expresarse frente al micrófono. A petición de la mayoría, se acordó una nueva toma indefinida de las instalaciones al ritmo de aplausos y entonaciones satíricas contra la rectora Julieta Castellanos.
 Los líderes estudiantiles anunciaron nuevas acciones para esta semana.
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El director de la Unah-vs, Francisco Herrera, compareció nuevamente ante los medios de comunicación e hizo el llamado a los protestantes a dialogar de manera seria y razonable.
En riesgo
Herrera lamentó que por una toma esté en riesgo el año académico de miles de estudiantes. Si las clases no se reanudan en un par de días se cancelaría por completo el segundo período académico en este centro. La reprogramación hecha por Vicerrectoría todavía daba espacio para que ambos períodos restantes en el año se desarrollaran con el tercero intensivo.
“Es una lástima realmente porque esperaba entablar diálogo esta mañana con los estudiantes, y lamentablemente nos sorprendieron con esta situación. Se hizo el llamado desde el lunes para comenzar el proceso, pero no accedieron argumentando que con policías en el campus no lo harían, sabiendo que los oficiales estaban en las afueras. Hoy no les importó que hubiera policías para sacar a los estudiantes de sus clases”, dijo. Agregó que no se puede considerar que las normas académicas se deroguen de manera radical, ya que eso es “ilógico y demuestra que no es esa la verdadera razón de protesta”. Sin embargo, indicó que estará abierto al diálogo, como lo ha hecho desde que comenzó la crisis.
