Un año no es suficiente para sanar heridas ni para olvidar una tragedia.
Ayer, cuando se conmemoró un año de la muerte del periodista Alfredo Villatoro, las palabras de ánimo les sentaron bien a familiares y amigos del comunicador asesinado, quienes volvieron a demandar justicia.
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Muerte de Ángen Alfredo Villatoro
En dos iglesias capitalinas y una sampedrana se oficiaron misas en memoria del recordado director de noticias de radio HRN.
“El periodista Alfredo Villatoro representa a miles de hondureños que fueron asesinados en el país, cuyos crímenes no han sido esclarecidos y la justicia está en deuda con los familiares de las víctimas”, reflexionó el sacerdote católico Ovidio Rodríguez.
La celebración se efectuó en la iglesia católica Juan Bosco, adonde asistieron familiares, compañeros y amigos del hoy extinto. En San Pedro Sula, la misa se tributó en la parroquia San Vicente de Paúl.
El padre Rodriguez recordó las palabras del pastor luterano Martin Luther King, quien expresó: “El silencio de los buenos es complicidad con los malos. Aquí no podemos ser cómplices del mal en Honduras”.
Villatoro, continuó, representa a miles de hondureños asesinados cuyos cadáveres fueron tirados en callejones, cañeras y cultivos y cuyas muertes aún permanecen en la impunidad.
“La justicia hondureña tiene una deuda terrible con las madres, con las viudas y con los hijos de los miles de hondureños a los que aún no se les ha hecho justicia”, lamentó Rodríguez.
Asimismo le rogó a Dios para que los operadores de la justicia en Honduras no se acomoden a rango político o económico y que juzgue compasivamente a tantas personas que son agentes del mal y que les cambie el corazón de piedra por uno de carne.
Libertad de expresión
En su homilía, el sacerdote señaló que la memoria de Villatoro acompañó al gremio periodístico durante los últimos tres meses en una lucha por evitar que se acalle la verdad. Esto en alusión a la denominada “ley mordaza”.
“Esta situación que hemos vivido en los últimos tres meses en el país ha sido una especie de cortina de humo para tapar tantos desafíos que tenemos en el país. Villatoro ha estado con ustedes periodistas, ha estado con el sentido común, porque la verdad no se puede callar”, resaltó el párroco.
Un año de incertidumbre
Carlos Villlatoro, hijo del comunicador fallecido, expresó en la misa que se reunió con el secretario de Seguridad para solicitarle que la muerte de su padre no quede en la impunidad.
“Creemos que hasta que sepamos de manera certera quiénes fueron los autores intelectuales de la muerte de mi padre, quiénes fueron los que dieron la orden, entonces, la sociedad y los medios de comunicación tendremos paz”, expresó.
El comisionado de los Derechos Humanos, Ramón Custodio, manifestó que por lo menos las autoridades detuvieron a supuestos autores materiales del secuestro y posterior asesinato.