Las descargas controladas de la represa hidroeléctrica Francisco Morazán (El Cajón), iniciadas el miércoles 22 y continuadas este jueves, no han representado riesgo significativo para las comunidades ubicadas en las riberas del río Ulúa.
Antes de las descargas, el caudal del río Ulúa era de 3.22 metros. Tras el vaciado de la represa, ha oscilado entre 4.30 y 4.38 metros, según el monitoreo de Comisión Permanente de Contingencias (Copeco).
"Es posible que suba a 4.50 el rango que habíamos esperado, pero ya no va a representar riesgo", manifestó Alberto López, de Copeco regional Valle de Sula.
Ante la leve amenaza de las descargas, autoridades de Copeco bajaron la alerta de amarilla a verde en los municipios aledaños al Ulúa, entre estos, Pimienta, Potrerillos y San Manuel en Cortés, Santa Rita, El Negrito y El Progreso en Yoro, hasta el Ramal del Tigre en Tela, Atlántida.
La alerta verde también incluye al Distrito Central en Francisco Morazán, producto de las lluvias y deslizamientos. Esta alerta estará vigente por un periodo de 48 horas, a partir de la 1:00 pm de este jueves 23 de octubre.
"Las descargas son buenas, porque se está protegiendo el valle de Sula ante cualquier huracán y se está buscando la operatividad en el punto de equilibrio para la represa. Las descargas son controladas, nos sentamos con todos los involucrados y discutimos los parámetros y los cálculos, no es al azar", apuntó Alberto López.
Cinthia Abreu, representante del comité de emergencia municipal (Codem) de El Progreso, aseguró que los monitoreos al río Ulúa desde que iniciaron las descargas, no ha mostrado una emergencia en la zona baja. "Las revisiones que se han hecho no hemos visto que haya algo fuera de lo normal. No hay incidencias de desborde del río".
Zonas de riesgo en El Progreso, Yoro
Los campos bananeros de Amapa, La Fragua, La Duarte, San José del Cayo y La Miller concentraban la mayor preocupación ante un posible desbordamiento del río, debido a la presencia de fisuras en los bordos identificadas en esas zonas.
Según datos de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee), entre el 14 de septiembre y el 21 de octubre se registraron aproximadamente 1,700 millones de metros cúbicos de agua sobre el embalse de la represa El Cajón, lo que obligó a realizar descargas controladas.
Las descargas alcanzan los 350 metros cúbicos por segundo y se prevé el cierre de compuertas una vez que el embalse retorne a los 286 metros sobre el nivel del mar, parámetro necesario para el funcionamiento normal de la central hidroeléctrica. Las lluvias recientes habían elevado significativamente ese nivel.