“Fue una imprudencia del señor”, declaró Javier Valenzuela, coordinador del zoológico del parque Rosy Walther de El Picacho, en torno a por qué el león Simba atacó a un hondureño que pretendió acariciarlo.
“A todas luces fue una imprudencia del señor, él traspasó los límites de las barandas e invadió el espacio para observar al león”, agregó Valenzuela a HRN.
Pese a lo ocurrido, el representante del zoológico aseguró que los visitantes podrán continuar viendo a Simba, pero deberán respetar su espacio, pues, aunque el león esté doméstico, si él se siente amenazado buscará defenderse.
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Simba es tranquilo
Una opinión similar tiene José Manuel Domínguez, quien es el cuidador de Simba. “Él (el león) es tranquilo. La mayoría de las veces pasa sentadito, no tiene nada de agresivo, pero ya cuando la gente trata de invadir su zona, él reacciona y más si no la conoce”, dijo.
Presuntamente el hondureño mordido por el animal, Albin Javier Lagos (35), metió su brazo izquierdo en la jaula con la intención de acariciar a Simba y por eso el animal lo atacó.
Simba es un león de más de 10 años que come 22 libras de carne a diario, según su cuidador, y a pesar de que algunas personas lo golpearon con palos para que soltara al hombre, no presenta ninguna lesión.
