Llegó el día, hoy es 21 de diciembre y culmina un gran ciclo maya, conformado por 13 baktunes, que acumulan un período de 5,125 años.No hay nada que temer, no es el fin del mundo, aseguran los arqueólogos y estudiosos de esta antigua civilización, y hay todo por vivir, dice la gente en Copán Ruinas, donde desde hace varios días se realizan actividades alusivas a esta fecha.
Los hoteles están abarrotados, la ciudad llena de turistas de todo el mundo, las calles están repletas de recuerdos con figuras mayas y es inmensa la expectativa por la llegada de este día.Vito Veliz, arqueólogo y jefe del departamento de Arqueología y Astronomía Cultural de la Facultad de Ciencias Espaciales de la Unah (Universidad Nacional Autónoma de Honduras), afirmó que este día solo es la conclusión de un período, nada más.
“Se especula mucho sobre lo que pasará el 21 de diciembre, pero la verdad es que para los mayas esto solo era un ciclo de tiempo, así como cuando para nosotros termina un año y comenzamos uno nuevo. Ellos tenían maravillosos conocimientos y por eso son admirados y a las personas les causa curiosidad saber más sobre esta civilización. Incluso es tanta la importancia que tienen históricamente los mayas que se ha aprovechado su nombre para hacer películas, comercializar turismo y muchas cosas más”.
Economía beneficiadaHay una impresionante afluencia de turistas en Copán debido a la gran expectativa que ha generado el final del ciclo maya. Ondina Luz Bueso de Molina, dueña del hotel Patty, declaró que es casi imposible encontrar una habitación estos días en la ciudad.
“La gente hizo reservaciones desde noviembre y el domingo ya empezaron a llegar. Muchos han venido en los últimos días sin haber reservado, pero no encuentran dónde quedarse. Algunos incluso se han ido a quedar en La Entrada, Copán, y desde allá están viajando hasta aquí. Todo esto de los mayas ha causado que el año haya sido mucho mejor que los anteriores y ahora lo que esperamos es que se queden con ganas de regresar, porque es positivo para la economía de todos en la ciudad y la región”.
Caminando por Copán pueden encontrarse personas que llegaron desde los rincones más lejanos del planeta. Holanda, Malasia, Francia, Estados Unidos y Camerún son solo algunas de las naciones de origen de los visitantes que ahora están en Copán debido a su admiración por los mayas, como el francés Pierre Minetti, quien es músico y asegura que está “enamorado” de las Ruinas de Copán.
“Es la primera visita que hago a Copán Ruinas y esto es un lugar lindo, no tenía idea de cuánto. Hay muchas cosas que ver. Vine para celebrar el inicio de la nueva era. Este es un día especial, el mejor para estar aquí, y quiero presenciar la entrada del sol. Estudié Filología Hispánica y para mí esta es una civilización mágica. Por eso siempre me apasionó a nivel de arquitectura. Sabían muchas cosas de astronomía y para mí tenían muchos conocimientos que aún hoy no se han comprendido ni superado”.
Un día únicoSegún Salvador Varela, director del Parque Arqueológico de Copán Ruinas y representante del Instituto Hondureño de Antropología e Historia para la región de occidente, “la hora cero ha llegado. Estamos en la finalización de la cuenta larga del calendario maya. Estamos muy contentos porque el turismo ha resurgido en esta zona y hemos tenido una fuerte afluencia de turistas.
Este 21 de diciembre habrá por lo menos unas 1,500 personas en el Parque Arqueológico”.Varela indicó que confían en que los turistas queden impresionados, no solo con los eventos, sino con las bellezas de Copán.“Hay mucho que ofrecer en esta ciudad. Además de los mayas hay muchas bellezas que visitar y conocer. La gente tiene una calidez muy especial y todo esto conllevará a que haya un efecto colateral, pues seguramente los turistas querrán volver. Creemos que incluso el próximo año puede continuar esta tendencia positiva para la economía y el ramo turístico”.
