Dos cocodrilos de aproximadamente dos metros se han apoderado del desagüe de aguas negras ubicado a un costado de los juzgados de San Pedro Sula.
Los peligrosos animales viven en el canal y por momentos salen a tomar el sol a las orillas, atemorizando a decenas de vecinos que viven en las colonias Islas de El Progreso y Panting.
Ilario Villalobos fue la primera persona que los vio e inmediatamente notificó a los bomberos.
“Yo pasaba por aquí y los vi sobre la arena que está en medio del crique, me asusté muchísimo y llamé a los bomberos. Eso fue hace más de un mes, pero los animales todavía están allí”.
Villalobos dijo que la principal preocupación que tienen los vecinos del sector es que uno de estos animales pueda morder a los niños que juegan en las orillas del canal.
“Cuando miramos que ellos salen con sus pelotas a jugar tenemos que correr a meterlos en las casas”, dijo.
Los trabajadores de la llantera El Sureño expresaron que ellos
también corren peligro, ya que el negocio se encuentra a uno de los costados del desagüe de aguas negras.
“Hemos visto a los cocodrilos a plena luz del día; a ellos no les importa la hora, se arrastran por las orillas y tienen más de un mes de estar en el canal”, dijo Francisco Mejía, uno de los trabajadores de la llantera, opinión apoyada por Saúl Fúnez, otro empleado de El Sureño, quien vive en la colonia Panting.
“Por mi casa sí salen seguido, todos los hemos visto pero nadie les hace nada por temor a que nos muerdan. Desde que están en el canal han desaparecido gatos, perros y gallinas de vecinos y creemos que fueron los cocodrilos quienes se los comieron”, finalizó Fúnez.
Carlos Lara, empleado de la municipalidad, indicó que al igual que él, sus otros compañeros conocían de la existencia de los animales en el lugar, lo cual los atemoriza.
Autoridades
El fiscal del ambiente, Juan Euceda, dijo que hasta el momento no tenía conocimiento del hecho, pero que en estos casos es necesaria la colaboración de especialistas en el campo para lograr hacer la captura de los animales.
El bombero Ramón García dijo que la responsabilidad de atrapar a los cocodrilos recae de manera directa sobre la Fiscalía del ambiente.
El canal se localiza a pocos metros de los juzgados sampedranos.
Precauciones
Se recomienda a los vecinos usar calzado al andar por la orilla de canal y en el borde del agua, pero sobre todo evitar andar o nadar en estas aguas y buscar ayuda médica en caso de una mordedura.
Claves
Niños
Por ser los más vulnerables se recomienda vigilarlos especialmente para evitar que se acerquen a tocar los cocodrilos y corran el peligro de ser mordidos.
Cercanía
Los animales se encuentran a una distancia de no menos de dos metros de distancia de las casas, con frecuencia se les puede ver arrástrandose por los patios de éstas.
Susto
Uno de los cocodrilos estuvo a punto de morder a un empleado de la municipalidad que trabaja en la pavimentación de la 33 calle, frente a los juzgados.
Acerca de los cocodrilos y su fuerza
Por lo general estos animales tienden a evitar el contacto directo con el hombre y la mayoría de ellos no atacan salvo que se les provoque, se sientan amenazados o estén en período de cría.
Las víctimas de cocodrilos que se han podido salvar y sólo han padecido de graves mordeduras corren más riesgo de muerte por las infecciones que por la mordedura en sí.
La boca de los cocodrilos es un enjambre de bacterias y parásitos, debido a los alimentos que comen.
Cuando se atrapa a un cocodrilo para su estudio, lo más importante es controlar su stress.
Estos animales suelen acumular mucho ácido láctico a causa de la energía destilada cuando se los atrapa, por eso en los zoológicos actúan rápido y tratan de taparles los ojos para tranquilizarlos.
Los dientes de los cocodrilos no sirven para masticar ni cortar, sólo para atrapar, pero es su fuerza la que provoca daños mayores.
Estos depredadores son capaces de sostener con sus dientes, si es necesario, a criaturas con miembros corporales ya completamente desarrollados y de un peso mayor al de ellos.
