26/07/2024
10:00 AM

Caótico final: ¿Quién era Wilson Ariel Pérez, el agresor de una subinspectora?

Autoridades informaron que murió en un enfrentamiento con la fuerza anti maras; su familia niega la versión.

San Pedro Sula, Honduras.

Su nombre estuvo a punto de figurar en listas de Interpol. En 48 horas pasó de ser un simple aficionado que presenciaba un partido de fútbol a perder la vida. Su rostro acaparó los principales portales, las portadas televisivas y pasó a ser objetivo primordial de autoridades hondureñas.

Eso comenzó cuando, entre la agitación y el caos del final del encuentro deportivo entre Real España y Motagua, por la final del fútbol hondureño, pateó a una joven subinspectora policial por la espalda en las graderías del Estadio Olímpico y esta cayó varios metros abajo, sin que, milagrosamente, sufriera heridas de gravedad.

De inmediato, en redes sociales se viralizaron las imágenes del joven cometiendo la agresión policial. El sistema de emergencias 911 se encargó de dibujar una radiografía sobre su actuar esa noche y parecía estar plenamente identificado, pero aún no se tenían certezas sobre su nombre ni su ubicación. Incluso, otro joven, oriundo de Colón, fue sindicado como el responsable, pero se trató de una confusión que, a día de hoy, no se aclaró a favor del perjudicado.

Wilson Ariel Pérez era más joven de lo que parecía o indicaban las propias autoridades policiales. Tenía 21 años y sus familiares aseguran, después de reclamar su cuerpo en el regional Hospital Mario Catarino Rivas que no pertenecía a una mara (MS-13).

Wilson Pérez fue parte de los disturbios el domingo. Intentó huir, pero murió en un enfrentamiento, dicen autoridades.

Por su paradero, la Policía de Honduras ofrecía 100,000 lempiras como recompensa, pero 48 horas no fueron suficiente para que algún ciudadano ofreciera la información de su ubicación.

Tenía 14 hermanos y residía en la periferia de Villanueva, en el seno de una familia de escasos recursos que, insiste, no murió en un enfrentamiento con la Fuerza Nacional Anti Maras y Pandillas (FNAMP) ayer por la tarde, como la parte oficial expone.

“No hubo enfrentamiento. Él iba para Tegucigalpa para canal 6 para entregarse a las autoridades con los Derechos Humanos y ahí los interceptaron, lo desviaron y lo mataron”, explicó Jerry Pérez, uno de los 14 hermanos del aficionado de Real España.

“Es mentira porque él (Wilson) en ningún momento pertenece a ninguna mara, ni pandilla. Tampoco sabe manejar un arma, él nunca había tocado un arma, todo lo que dicen sobre eso es mentira porque nunca hubo un enfrentamiento”, sostiene otro de los hermanos, no identificado, en declaraciones a HCH.

Una hermana de Pérez manifestó anoche, cuando reclamaban el cuerpo, que “no iba a la escuela y no se metía con nadie”. Tampoco informaron si Pérez actualmente tenía un empleo o se dedicaba de tiempo completo a alguna actividad. Solo se limitaron a decir que trabajaba, esporádicamente, en albañilería.

En declaraciones, los familiares argumentan que Wilson Pérez tampoco era miembro de la Mega Barra, la barra organizada de Real España, club sampedrano. Esta última se vio inmersa en la invasión a la cancha del Olímpico el domingo, después de la derrota de su equipo.

“Yo no supe nada. Si hubiese sabido, lo habría mandado para Santa Bárbara”, señaló, al tiempo que detalló que el lunes (un día después de la agresión) llegaron dos patrullas de la Policía, entre las 11:00 am y 12:00 pm, al sector donde reside. Posteriormente, a eso de la 1:00 pm, se hicieron presentes al menos cinco vehículos policiales, amplió Vinicio Pérez, padre de Wilson.

El padre de Wilson Pérez exigió justicia en el caso.

Además, aseguró que su hijo no pertenecía a ningún grupo delincuencial de maras o pandillas. También pidió una respuesta a la Policía Nacional de Honduras por los incidentes ocurridos en su vivienda.

La policía, a través del comisionado Miguel Martínez Madrid, describe a Wilson Pérez como un “individuo con categoría dentro de la organización de dar diferentes directrices”, aunque no amplían en la misma.

Wilson Pérez, según el informe, era originario de Villanueva, Cortés, y era conocido con el alias de “Palabrero”. La Dirección Policial de Investigaciones (DPI) informó que abrieron una investigación sobre el caso y que los informes revelarán nuevos detalles relacionados.