24/05/2024
01:43 AM

Aumentan atenciones de salud mental, pero faltan recursos

San Pedro Sula, Honduras.

Aunque la demanda de pacientes que requieren los servicios de siquiatría y sicología en el hospital de salud mental San Juan de Dios ha aumentado un 20%, los recursos financieros del centro se reducen cada vez más.

El hospital San Juan de Dios, ubicado en la residencial Palos Verdes, es el único centro especializado en salud mental en San Pedro Sula.

Gudiel Sánchez, director del sanatorio, informó que debido a que en 2014 hubo un aumento del 3% en las atenciones médicas y cerca de un 20% este año, se vieron obligados a contratar un tercer siquiatra, con el que redujeron la mora en las citas programadas. “Antes el paciente esperaba ocho días o más para una consulta, ahora por mucho son tres días de espera”, dijo. El 57% de las atenciones en el San Juan de Dios las reciben las mujeres; el 43% es para los hombres.

La depresión, bipolaridad, ansiedad y esquizofrenia son los cuatros trastornos mentales tratados con más frecuencia en el hospital.

Sánchez detalló que de enero a la fecha se ha atendido a más de 4,500 personas. El 60% de estas son de San Pedro Sula y el resto de los diferentes municipios del Valle de Sula. Para su mantenimiento se requiere un presupuesto de L8.5 millones anuales.

Desde hace más de cinco años que las autoridades del San Juan de Dios solicitan ayuda del Gobierno para habilitar una área de hospitalización que atendería a un promedio de 33 pacientes por día. “El año pasado se presentó la moción, fue leída y sabemos que está en la comisión de dictamen y de asignación presupuestaria; pero no sabemos más”, señaló.

Para echar a andar el hospital necesitan que el Gobierno se comprometa a darles un presupuesto de L40 millones cada año.

El siquiatra Rolando López, director médico, manifestó que la mayoría de los trastornos mentales que se atienden son causados o detonados por estrés, desempleo, frustración y problemas sociales, como la inseguridad. “Vemos enfermedades que están empezando en la adolescencia, como la depresión y el déficit de atención”.