19/04/2024
11:22 AM

En 21.9% se desploma la recaudación tributaria

Como consecuencia directa de la pandemia, el ingreso tributario ha caído en más de L9,667.7 millones Finanzas busca reorientar 16% del presupuesto.

SAN PEDRO SULA.

Durante los cinco primeros meses del año, la recaudación de impuestos cayó en 21.9%, equivalente a L9,667.7 millones, con relación a 2019.

La disminución es una consecuencia directa de la pandemia que llevó al confinamiento y la paralización de las actividades económicas en Honduras, dijo Rocío Tábora, titular de la Secretaría de Finanzas (Sefin).

Los ingresos tributarios a mayo de este año ascendieron a 34,433.9 millones de lempiras, es decir, L9,667.7 millones menos respecto al año anterior.

14.9%
Caída interanual.La recaudación de los impuestos a los combustibles registró L919.8 millones menos a mayo de 2020.
“La situación económica del país se ha visto afectada por efecto del COVID-19, y por lo tanto hemos visto esa economía afectada por las medidas de confinamiento que se han obligado a tomar para proteger nuestras vidas y la salud. Pues eso se ha visto reflejado en la recaudación tributaria”, dijo Tábora.

El impuesto sobre la renta (ISR) mostró una recaudación inferior al presupuesto de 3,876.8 millones de lempiras (27.7%), como consecuencia de la caída de los ingresos, principalmente en los pagos que tenían vencimiento el 30 de abril.

El impuesto sobre la propiedad durante enero-mayo generó diferencias negativas de L266.7 millones, esto debido a la baja en las distintas subcuentas: impuesto sobre tradición de inmuebles y el impuesto al activo neto, para el que se otorgó una prórroga hasta el 30 de junio.

941.7
Millones de lempiras.Merma en la recaudación de los ingresos no tributarios, principalmente por la caída en la venta de bienes.
El consumo de bienes y servicios, que genera el impuesto de producción, consumo y ventas, totalizó L16,210.4 millones, que equivale a L3,761.0 millones en relación con el presupuesto.

“Los niveles de recaudación de este impuesto se han visto afectados debido a las restricciones de movilización y comercialización originadas por las medidas de confinamiento que decretó el Gobierno a mediados de marzo y en la que únicamente ciertos comercios de abastecimiento de alimentos fueron autorizados para operar”, explicó Tábora.

A inicios de la crisis sanitaria, Sefin y el Servicio de Administración de Rentas (SAR) estimaron que la caída en la recaudación rondaría menos del 16%.

“Ojalá que con las medidas de reactivación económica, beneficie el ingreso de las familias, del empleo y de las grandes empresas, y que también eso se refleje en la mejora de la recaudación tributaria”, expresó Tábora.

Foto: La Prensa

Ante mejor recursos para financiar el presupuesto general, el Estado, a través de Finanzas, ha reorientado partidas para atender prioridades.

“La menor recaudación afecta la ejecución presupuestaria. Frente a eso y basándonos en las disposiciones del presupuesto 2020, específicamente a las disposiciones número 21 y 22, hemos venido haciendo una contención en el presupuesto y nos vemos obligados a hacer una mayor contención en el presupuesto tanto de la administración central, las descentralizadas y de los órganos constitucionales”, afirmó Tábora.

El recorte presupuestario conlleva distintas medidas para contener y reorientar el gasto público, en reacción a la caída de la recaudación de impuestos.

Foto: La Prensa

“Urgimos a los gobiernos de CA a ser transparentes en los gastos hechos para enfrentar el COVID-19”: Ricardo Barrientos,Economista del Icefi
Una de la primeras decisiones de Finanzas ocurrió a mediados de marzo cuando reorientó 2% (L2,600 millones) del presupuesto general del actual ejercicio fiscal, que en total supera los L282,000 millones, para atender la emergencia.

Tábora anunció hace unos días que comenzaron reuniones con el Congreso Nacional para recortar el 16% del presupuesto general, que significan L45,173.7 millones, lo cual implicaría una reducción del gasto público.

Transparencia

Días atrás, el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales ( Icefi) realizó una evaluación, desde la perspectiva de los estándares de transparencia fiscal, de los planes para atender la crisis y la emergencia causada por el impacto de la pandemia del COVID-19 en Centroamérica.

Los resultados de este ejercicio revelan disparidad en los grados de transparencia de los planes de emergencia que los gobiernos centroamericanos están implementando, por lo que formuló recomendaciones para facilitar el acceso a la información pública y permitir la veeduría y auditoría social adecuadas.

Foto: La Prensa

“Confiamos que esta reactivación nos permitirá mejorar la economía de las empresas y la de los hogares”: Rocío Tábora, Secretaria de Finanzas
En el caso puntual de Honduras destacó que si bien Segin ha creado en su página web un apartado específico para el seguimiento tanto a la ejecución presupuestaria como a la movilización de recursos, incluyendo los ingresos tributarios, los apoyos presupuestarios, los fondos externos y otros en el contexto de la emergencia, no puntualiza la frecuencia de actualización, solamente refiere que estará realizándose “regularmente”.

“Además, Finanzas no ha publicado informes sobre las decisiones fiscales para enfrentar la pandemia, por lo que deben consultarse las comunicaciones oficiales y el módulo específico comentado”, agregó el Icefi.

El Instituto sostiene que medidas de transparencia de las acciones fiscales, promueven la legitimidad de los gobiernos y alientan la confianza de la ciudadanía en sus autoridades.

Foto: La Prensa