Con el semblante desencajado y la ansiedad a flor de piel por estrechar en brazos a su hija llegó la madre de Nataly Perdomo (8), la hija de Marco Perdomo Guzmán, el hondureño asesinado en Coahuila, México, al Aeropuerto Internacional Ramón Villeda Morales en San Pedro Sula a esperar el vuelo en que venía su pequeña.
La madre de la menor relató la corta llamada que tuvo con su hija luego del terrible hecho que le costó la vida a su esposo, 'mi niña me dijo: 'Mami mi papi me llevaba de la mano y le dispararon'.
La pequeña presenció como su papá cayó desvanecido al suelo tras el disparo... Minutos más tarde murió. Nataly fue acogida por las autoridades y reunificada con un tío que se encontraba residiendo en México.
El tío de la menor la acompañó hasta Honduras para entregársela a su madre, quien se encontraba en la sala de espera del aeropuerto Villeda Morales junto a otros familiares del fallecido.
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Los minutos se hicieron largos, pero finalmente el momento tan anhelado llegó. Nataly pudo aferrarse a los brazos de su mamá tras la terrible vivencia.
La prima hermana de Perdomo Guzmán dijo a Diario LA PRENSA en exclusiva que él se aventuró a ese camino tan peligroso porque estaba desesperado por obtener un mejor empleo y así poder construirle una casa a su mamá, esposa e hijos.
'Él sentía que trabajaba de sol a sol, pero que no podía salir adelante. Así que decidió hacer el viaje y se llevó a su hija para entrar más fácilmente', comentó.
La menor salió del aeropuerto de la mano de su mamá rumbo a Santa Rosa de Agua, departamento de Colón, desde donde un día salió junto a su padre con muchos sueños y esperanza de un futuro mejor, que ahora se convirtieron en una amarga tragedía.
Lester Montoya, oficial de asistencia para el Migrante Retornado, dijo que la Secretaría de Relaciones Exteriores a través del consulado de Saltillo, México, se encuentran en los trámites de repatriación del cuerpo del hondureño.
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'Existe un tiempo estimado de entre 15 a 20 días hábiles, pero todo dependerá de la investigación que está haciendo la Fiscalía General de México con la Policía Federal para determinar las causas contundentes del hecho. Sin embargo, trataremos de agilizar lo más rápido que podamos', comentó Montoya.
Los hechos...
El suceso ocurrió la noche del miércoles cuando un grupo de 10 personas, incluyendo menores de edad, acababan de dejar la Casa del Migrante de Saltillo, la capital del estado, para proseguir su trayecto hacia Estados Unidos, relató Alberto Xicoténcatl, activista y director del refugio.
Cerca de las vías del tren, a kilómetro y medio del albergue, los migrantes fueron sorprendidos por un operativo, supuestamente de agentes del Instituto Nacional de Migración (INM), la Policía Federal y policías municipales, que intentaron separar a niños de sus padres, según testimonios que los migrantes dieron al activista.
'Se acercaron camionetas negras de las cuales bajaron hombres armados, encapuchados, con cascos, quienes sin razón alguna empezaron a dispararles', dijo Xicoténcatl a la emisora local Radio Centro.
En medio del desorden, el hondureño corrió junto a su hija, cuando fue alcanzado por las balas. El grupo huyo de vuelta al albergue y posteriormente 'nos enteramos por los medios de comunicación que este joven de 29 años había perdido la vida', añadió Xicoténcatl.
Tras la denuncia, los ministerios de Seguridad, Gobernación (Interior) y Relaciones Exteriores dijeron en un comunicado conjunto que 'los elementos de la Policía Federal y el personal del Instituto Nacional de Migración no participaron en ningún operativo relacionado con estos hechos'.
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'Las investigaciones y el deslinde de responsabilidades estarán a cargo de la Fiscalía General del Estado de Coahuila', agregaron.
La fiscalía, por su parte, sostuvo en un comunicado que el individuo muerto era uno de cuatro sujetos que agredieron verbalmente y con disparos de arma de fuego a agentes de la Policía de Investigación Criminal que realizaban un operativo.
'Los oficiales repelen la agresión con sus armas de cargo por lo que el agresor cae abatido', según el documento, que no precisa ningún dato sobre la identidad o nacionalidad de la víctima, ni la presencia de niños en la escena.
'Esto nos resulta completamente fuera de todo sentido porque conocimos a este joven, es un joven de 29 años, es una familia extremadamente empobrecida', replicó Xicoténcatl.
'Nos parece que se está revictimizando, se está manchando el honor de las víctimas', agregó.
Este nuevo incidente se registra en medio de la presión que ejerce Washington para que México reduzca el flujo de migrantes indocumentados, principalmente de Centroamérica, que intentan llegar a Estados Unidos.
