Un pacto voluntario entre productores, industriales y autoridades permitirá reducir la deforestación asociada con el cultivo de palma africana en el país.
En los últimos años, la expansión de este cultivo ha penetrando 1.1% de las áreas protegidas y zonas sensibles del país, generando una preocupación en el mercado internacional que ahora exige una sostenibilidad a los países productores de aceite de palma. “Honduras tiene más de 50 años de trabajar este cultivo. Hay muchos pequeños productores involucrados, y ahora el mercado internacional demanda tener un rubro libre de deforestación”, explicó Flabio Linares, director técnico de Programas para Solidaridad, organización que ha estado liderando este tema.
La firma de un acuerdo entre los actores principales de este cultivo, permitirá reducir esa amenaza. “En este sentido hemos logrado conjuntar grupos de interés, no solamente en los productores de aceite de palma, sino también en la industria, de la organizaciones sociales y también las entidades principales del Estado”, indicó.
| Unas 12 empresas productoras de aceite de palma sostenible y la Fenapalmah serán las primeras en aportar a la protección del bosque. El 27% de los bosques están bajo presión de la frontera agrícola por varios cultivos en el país.
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“Estamos identificados con Honduras, porque sabemos que necesitamos cero deforestación en nuestro país”, opinó Ana Cilia Molina, representante de la planta extractora de aceite Aceydesa. Dentro de dos años, este acuerdo debe tener avances significativos, “hay compromisos de parte de todas las empresas e instituciones ambientales y del Gobierno.Dentro de la firma del convenio se constituyó un equipo técnico que trabajará en las acciones que se estarán ejecutando en pro del cumplimiento de este acuerdo”, mencionó Alejandra Muñoz, de la Asociación Agroindustrial de Palmicultores de Sabá (Asapalsa). Los productores ahora tienen el compromiso de producir más en sus mismas áreas, que seguir expandiendo sus cultivos.
