Los miles de migrantes de diversas nacionalidades que esperan con ansia un salvoconducto que les permita cruzar México rumbo a Estados Unidos no temen al presidente Donald Trump y viven ajenos a las duras declaraciones del mandatario estadounidense.
Yres Mary Pierre, un traductor haitiano de inglés y francés, dijo a Efe que tiene 17 días en la ciudad mexicana de Tapachula, estado suroriental de Chiapas, a la espera del salvoconducto de las autoridades migratorias.
“Yo vengo de Haití, entonces yo tengo casi un mes en esta travesía por el salvoconducto. Ya llevo casi 17 días acá viviendo en la plaza y pienso que el presidente de Estados Unidos, bueno, él no puede mandar en México (...). El que manda aquí es el Gobierno de México, no Estados Unidos”, manifestó.
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Añadió que tiene familia en Estados Unidos. “Me encanta México, pero quiero llegar allá”, sostiene.
Denis Hernández Barón, un migrante cubano, se encadenó frente a la estación migratoria Siglo XXI en protesta porque el Instituto Nacional de Migración los tiene esperando sin que avance su trámite para obtener el salvoconducto.
“Que nos den nuestros oficios de salida. No tenemos nada, no se sabe nada, no sale la respuesta; un silencio que no se comprende”, declaró.
Consideró que la política de frenar la migración “está llevando a la humanidad al más alto extremo”, y criticó el retraso de las autoridades mexicanas para permitirles seguir su camino: “Estamos en el precipicio, no se da respuesta. No es justa la decisión que está tomando”.
Claves
1Desde octubre pasado, miles de migrantes del Triángulo Norte han recorrido México en multitudinarias caravanas con la esperanza de llegar a Estados Unidos para pedir refugio.
2Más de 3,000 centroamericanos se encuentran en el municipio de Mapastepec, Chiapas, fronterizo con Guatemala, después de salir en grupos desde sus países de origen. 3El presidente Donald Trump ha alternado esta semana sus amenazas de construir un muro fronterizo con felicitaciones a Manuel López Obrador por las recientes deportaciones. 4Trump arremetió contra el sistema de asilo de su país, hasta el punto de pedir a sus agentes migratorios que nieguen la entrada a los indocumentados que solicitan refugio. |
“Está plasmado en muchas leyes. Que (López Obrador) se siente por un segundo, que se ponga esta cadena para que él sienta estar así”, dijo, y añadió que entre los migrantes parados “hay mujeres embarazadas, no comen, no se bañan”.
“Por favor, todos los mexicanos entiendan a los migrantes. Esto es un derecho que tenemos hoy los seres humanos”, puntualizó.
En tanto, las autoridades migratorias de México empezaron a repatriar desde el jueves a migrantes de varias nacionalidades que se encontraban en las estaciones migratorias de Tapachula, en la frontera sur del país.
El sueño americano se ha visto frustrado para más de 200 migrantes que han sido deportados a sus países, mientras más de 500 africanos y asiáticos esperan afuera de la estación Siglo XXI a la espera de ser atendidos por el Instituto Nacional de Migración.
Otros 2,476 migrantes aguardan en el municipio fronterizo de Mapastepec, también en Chiapas.
Deportaciones
El viernes partió del aeropuerto de Tapachula otro vuelo de la Policía Federal con 60 cubanos deportados.
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Lo mismo ocurrió con más de 100 centroamericanos que, en cinco autobuses, también fueron trasladados de la estación migratoria a un albergue para ser deportados.
Caravanas. Después del cruce de varias caravanas de migrantes centroamericanos que han ingresado a este lado de la frontera desde octubre del año pasado, con la llegada de los migrantes extracontinentales este se convierte en el éxodo más numeroso que arriba a la ciudad fronteriza de Tapachula.
El viernes pasado, el presidente de EUA, Donald Trump, amenazó con sancionar a México debido al narcotráfico y arremetió contra el sistema de asilo en su país, hasta el punto de pedir a sus agentes migratorios que nieguen la entrada a los indocumentados que solicitan refugio en la frontera.
En una visita a la zona limítrofe de California, Trump solicitó cerrar la puerta a los cientos de inmigrantes, muchos de ellos centroamericanos, que cada día llegan a la frontera y dicen tener miedo de ser perseguidos en sus países, con la esperanza de obtener asilo en Estados Unidos.
Ayer el presidente Trump anunció la reubicación de 750 agentes procedentes de “puertos de entrada específicos” a lo largo de la frontera con México para ayudar en tareas de control de inmigrantes, lo que conllevará “retrasos en el tráfico de vehículos y comercial”.
El mandatario reconoció que esta medida “causará retrasos en el tráfico de vehículos y comercial” hasta que México “sea capaz de emplear su poderosas leyes migratorias de sentido común” para impedir la llegada de nuevos migrantes a la frontera con EUA y los deporte.