19/06/2025
07:18 AM

Visita para la historia

Los grandes duques de Luxemburgo, Enrique y María Teresa, visitaron la casa real belga durante una visita de amistad en la que compartieron con los reyes Alberto y Paola.

Los grandes duques de Luxemburgo, Enrique y María Teresa, visitaron la casa real belga durante una visita de amistad en la que compartieron con los reyes Alberto y Paola.

La pareja ducal se trasladó en coche desde Luxemburgo. Delante del palacio les esperaba, lista para partir, una escolta motorizada a la que en Bruselas se añadió un acompañamiento de caballería para hacer la entrada en el palacio real.

Allí se interpretaron los himnos nacionales, se inspeccionó a la guardia real y se hicieron las presentaciones de las delegaciones.

Poco después, Enrique y María Teresa se desplazaron a la columna del congreso para realizar una ofrenda con una corona de flores, de nuevo acompañados de una colorida y regia escolta a caballo.

Al final de la mañana, los invitados luxemburgueses, que ya habían almorzado con sus parientes belgas y habían recibido la visita del primer ministro Verhofstadt, se dirigieron al ayuntamiento de Bruselas.

En la sala gótica, el alcalde Freddy Thielemans sorprendió a los presentes con un discurso parcialmente en luxemburgués, lo cual fue correspondido con cálidos aplausos por parte de Enrique y María Teresa.

Como broche de oro a esta primera jornada de visita, la familia real de los belgas obsequió a sus invitados con una cena de gala en el palacio de Laeken.

Durante los brindis, el gran duque Enrique dirigió unas cálidas palabras a sus tíos, y en especial al rey Alberto, su padrino.