La idea de interpretar a una vampiresa, esposa del mismísimo Frankenstein, no le agradaba del todo.
Pero Yvonne De Carlo, quien fuera elegida Miss Venice Beah en 1938, y quien fuera amante de hombres como Howard Hughes, Burt Lancaster y Billy Wilder, tuvo que aceptar la propuesta por razones económicas: tenía que pagar las facturas médicas dejadas por su ex marido, el actor Bob Morgan.
Morgan resultó gravemente herido durante el rodaje de “How the west was won”.
No tenía idea ella de que el día de su muerte el mundo la iba a recordar como Lily Munster, la vampiresa de la tele, la mujer que en los años sesenta puso de moda el estilo “gótico”.
Quién era
Nacida en Vancouver, Canadá, el 1 de septiembre de 1922, la carrera de Margaret Yvonne Middleton -su verdadero nombre- comenzó temprano en películas menores de aventuras y de vaqueros, donde brillaba más por su figura que por su talento.
Pero en la década de los 50 disfrutó de su edad dorada con el papel de Sephora, la esposa de Moisés, en la película Los diez mandamientos, que filmó junto a Charlton Heston.
También por esa época, la actriz Yvonne De Carlo comenzó a coquetear con la televisión, donde participó en series como Bonanza, en el año de 1959, y The Virginian.
Aunque fue Los Munsters, la exitosa parodia de las cintas de terror de la compañía Universal, la que encumbraría su nombre.
Será mejor recordada como Lily Munster. Ella fue la madre vampiresa para millones de bebés de la posguerra. En ese sentido, es un icono.
Pero los televidentes siempre la recordarán como Lily Munster, la madre de la comedia de terror “La familia Munster”, que se grabó entre 1964-1966.
Al final de la serie, De Carlo comentó: “Me dio seguridad. Me dio un público nuevo, joven, que no tendría de otro modo. Me puso ‘de moda’ de nuevo”.
