Durante muchos años se dijo que las carnes rojas se acompañan con vino tinto y el pescado con vino blanco. Pero esa regla ya pasó a la historia; ahora casar un vino con comida depende mucho del maridaje y las salsas.
Elegir un vino adecuado para determinada comida depende más de gustos personales que de etiquetas y reglas establecidas.
El chef chileno del Hotel Intercontinental Manuel Arenas dice que actualmente cualquier tipo de vino se combina con carnes blancas y rojas, pues todo depende de los tipos de carnes con sus guarniciones.
Por ejemplo, los vinos tintos se acompañan con todas aquellas carnes rojas y blancas con salsas rojas o fuertes.
También los pescados que llevan grasa y sabores fuertes se compensan con vinos tintos con mucho cuerpo.
Por lo general, los vinos dulces son para degustar con algunos postres y los vinos afrutados para acompañar moluscos como calamar, pulpo y camarón, todos éstos son algo insípidos y necesitan un poco de sabor que sólo se lo brinda el vino.
Cómo seleccionar
Arenas explica que el mejor vino es el que a cada persona le satisface y lo puede saborear como guste. Pero si tiene planeada una cena en su casa y sólo ofrecerá un plato fuerte con carnes variadas, guarniciones en salsa y postre, tendrá que optar por un vino de reserva que tiene más taninos y es perfecto para limpiar el paladar.
En San Pedro Sula hay variedad de tiendas que le ofrecen selectos vinos. Para iniciarse en la cultura y conocer más de esta bebida puede incorporarse al Wine Club de Alco o visite Deriva Boutique, un sitio perfecto para degustar desde los vinos más sencillos hasta aquellos más añejados.
Recuerde que al final lo que cuenta es el vino de su elección personal.
