La mayoría de las pastillas y fármacos adelgazantes, ya sea con o sin receta médica, dice tener efectos diuréticos, moderadores del apetito y quemagrasas.
A excepción de los medicamentos indicados en caso de obesidad, el resto es prácticamente ineficaz si no se combina con dieta o ejercicio y hasta peligroso si se toma sin control.
Es decir, si ingiere estos medicamentos debe bajo prescripción médica o como complemento de un plan de adelgazamiento serio. Lo ideal es que siempre cuente con la opinión de un nutricionista.