El Festival de cine de Sundance comenzó el jueves reivindicando el regreso a las películas de naturaleza rebelde y arriesgada, con la exhibición de la cinta “Howl”, sobre la vida del poeta Allen Ginsberg, y el documental de guerra “Restrepo”.
Respaldado por el Sundance Institute, del actor y activista Robert Redford, el festival comenzó en la década de 1980 para promover películas realizadas fuera del circuito de los estudios importantes de Hollywood. La temática de este año será renovar la independencia que defendió en un principio.
“A veces volver a tus raíces es algo fresco y nuevo”, dijo Redford ante una sala repleta en la primera noche de la actividad. Redford había dicho poco antes a los periodistas que en los últimos años se había dado cuenta de que el festival se estaba “alejando” de su visión original debido a que las películas independientes habían empezado a vincularse estrechamente con los grandes estudios.
Por el cine independiente
La vuelta a los orígenes más independientes de este festival tiene su manifestación más clara en la creación de una nueva sección, Next, que dará cobijo a producciones de muy bajo presupuesto, prácticamente caseras.
Pero las estrellas hollywoodienses no quedarán del todo fuera. Se presentarán, entre otras, “Welcome Rileys”, protagonizada por James Gandolfini, o “The company man”, con Kevin Costner y Ben Affleck.
Tras unos años de ostentoso crecimiento, el sector del cine independiente está en franca recesión. Los estudios han recortado o liquidado sus departamentos en esta área de forma drástica. ¿Ayudará Sundance a retomar el ritmo?
“Nuestra obligación es apoyar a los artistas independientes y celebrar la originalidad, creatividad y capacidad de contar historias. No es nuestro papel decidir qué se verá dentro de un año en las salas comerciales”, dijo el fundador de esta aventura.