La rotura de la cremallera del vestido de Dior que tenía previsto llevar Penélope en la entrega de los Oscar 2007 está dando mucho que hablar.
La honestidad de la actriz está en entredicho pues han surgido voces que ponen en duda que la prenda llevara cremallera cuando lo normal en este tipo de trajes es que se cierren con una botonadura.
Sin embargo, el silencio de la Casa Dior, que acaba de presentar en París su última colección es tan elegante como significativo.
Opacada
El brillo que adquirió la elegancia de la actriz española está siendo ahora opacado por la mala publicidad que una información de este tipo acaba arrojando sobre la personalidad a la que se cuestiona.
Esta noticia puede afectar seriamente a la honestidad de la actriz pues en ocasiones como estas se recuerda la máxima: “la mujer del César no sólo ha de ser honrada, también ha de parecerlo”... y que no se aclare el tema de la cremallera o la botonadura no augura buena prensa.
Penélope Cruz ha sido encumbrada como la diosa de la elegancia de los Oscar por delante de otras divas como Cate Blanchett o Nicole Kidman.
Ambas, poseedoras de sendos Oscar no obtuvieron en esta ocasión el galardón simbólico de las mejor vestidas de la ceremonia.
