Hugh Laurie ya lo había dicho el año pasado: “El final de la octava temporada de ‘Dr. House’, hasta ahora, parece ser el final del programa”. Y tenía razón: Fox anunció ayer que ya no habrá una novena temporada para el genial y neurótico doctor.
Las señales comenzaron la primavera pasada, cuando al actor protagónico solo le quedaba un año más de los tres que estipulaba su último contrato y no había pláticas para más.
Así, el drama médico llega a su fin y, de acuerdo con un comunicado emitido por los productores del show, David Shore y Katie Jacobs, y por el mismo Laurie, fue una decisión muy dolorosa.
Difícil adiós
El trío explica que el programa siempre buscó ofrecer un mundo coherente en el que la lógica y la verdad convivieran con la ética y las emociones.
“House ha intrigado a su público alrededor del mundo y ha demostrado que existe un gran apetito para el drama televisivo que recurre a algo más que una cara bonita o los tiroteos.
“Y ahora es tiempo de hacer un cierre. House siempre fue una criatura enigmática; no debería ser el último en irse de la fiesta. Es mejor desaparecer antes de que la música se detenga, mientras todavía hay algo de misticismo en el aire”, continúa el comunicado expuesto en la página oficial de la cadena Fox. También se indica que para abril habrán concluido de grabar los 177 episodios con lo que oficialmente contará la serie “Dr. House”, que inició en el 2004, y que a lo largo de estos años se ha hecho acreedora a un sinnúmero de premios entre ellos por su música, por su guión y por supuesto por su actuación: Laurie ha estado nominado durante seis años consecutivos y ganó dos de ellos el Globo de Oro al Mejor Actor en una serie televisiva, en el 2006 y 2007.