San Pedro Sula, Honduras.
A escasos tres meses de haber comenzado la cosecha 2015-2016, el sector empresarial ligado a esta actividad encendió con anticipación las alarmas para prevenir un delito de carácter tributario.
La junta directiva de la Asociación de Exportadores de Café de Honduras (Adecafeh) emitió ayer un comunicado en que advierte a las autoridades competentes sobre el incremento considerable del contrabando de café hacia países vecinos.
“De no tomar acciones concretas respecto a esta situación podrían salir del país más de un millón de sacos de café, lo que significará menor recaudación de impuestos para el Estado y representaría más de $120 millones en divisas que se dejarían de percibir por concepto de exportación de café”, reza el documento.
Para ese fin, los directivos del Adecafeh solicitan a las autoridades proceder con las investigaciones y promover las acciones judiciales correspondientes para frenar esa actividad ilícita.
“En años anteriores ha habido contrabando de café proveniente de todas partes de Honduras y que, además, es de buena calidad. Es precisamente por el riesgo que se corre que emitimos el comunicado para solicitar que las autoridades hagan algo e investiguen qué es lo que sucede”, refiere Miguel Pon, gerente general de Adecafeh.
Basados en casos anteriores, el contrabando proviene de intermediarios guatemaltecos que garantizan mejores precios de compra a los cafetaleros hondureños.
La sequía en el vecino país provocó la pérdida de 100 mil quintales de café.
La cosecha anterior cerró con 4.1 millones. La expectativa para la temporada actual es de 4.2 millones de quintales de café, que representa una baja de 2%, a las expectativas del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (Maga) de Guatemala.
Cifras
El Instituto Hondureño del Café (Ihcafé) cerró el ciclo 2014-2015 con 6.54 millones de sacos de 46 kilogramos exportados, lo que significó $1,015 millones en ingresos. Los exportadores reportan 58 países compradores de grano durante esa cosecha, de la que el 64% salió con destino a Europa. 31% al continente americano, 4% hacia Asia y un 1% restante a Oceanía y África.
A escasos tres meses de haber comenzado la cosecha 2015-2016, el sector empresarial ligado a esta actividad encendió con anticipación las alarmas para prevenir un delito de carácter tributario.
La junta directiva de la Asociación de Exportadores de Café de Honduras (Adecafeh) emitió ayer un comunicado en que advierte a las autoridades competentes sobre el incremento considerable del contrabando de café hacia países vecinos.
“De no tomar acciones concretas respecto a esta situación podrían salir del país más de un millón de sacos de café, lo que significará menor recaudación de impuestos para el Estado y representaría más de $120 millones en divisas que se dejarían de percibir por concepto de exportación de café”, reza el documento.
Para ese fin, los directivos del Adecafeh solicitan a las autoridades proceder con las investigaciones y promover las acciones judiciales correspondientes para frenar esa actividad ilícita.
“En años anteriores ha habido contrabando de café proveniente de todas partes de Honduras y que, además, es de buena calidad. Es precisamente por el riesgo que se corre que emitimos el comunicado para solicitar que las autoridades hagan algo e investiguen qué es lo que sucede”, refiere Miguel Pon, gerente general de Adecafeh.
Basados en casos anteriores, el contrabando proviene de intermediarios guatemaltecos que garantizan mejores precios de compra a los cafetaleros hondureños.
La sequía en el vecino país provocó la pérdida de 100 mil quintales de café.
La cosecha anterior cerró con 4.1 millones. La expectativa para la temporada actual es de 4.2 millones de quintales de café, que representa una baja de 2%, a las expectativas del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (Maga) de Guatemala.
Cifras
El Instituto Hondureño del Café (Ihcafé) cerró el ciclo 2014-2015 con 6.54 millones de sacos de 46 kilogramos exportados, lo que significó $1,015 millones en ingresos. Los exportadores reportan 58 países compradores de grano durante esa cosecha, de la que el 64% salió con destino a Europa. 31% al continente americano, 4% hacia Asia y un 1% restante a Oceanía y África.
