08/12/2025
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Propuesta anticrisis de Maduro no convence a venezolanos

  • 01 enero 2015 /

El país sudamericano arranca el año 2015 con un escenario complicado .

Caracas, Venezuela

Más allá de unas confusas propuestas de inversión extranjera, el presidente venezolano Nicolás Maduro dijo poco o nada concreto sobre el gasto público y la recesión económica que golpeará a Venezuela en 2015.

Durante su intervención del martes pasado en el Palacio de Miraflores, Maduro no logró satisfacer con sus anuncios en materia económica y entre sus palabras tampoco convenció sobre cómo rectificar la tendencia negativa de la constante caída del crudo.

Según datos divulgados por el Banco Central de Venezuela (BCV), el país entró esta semana en recesión con una caída de su producto interno bruto (PIB) durante tres trimestres consecutivos y registró una inflación interanual récord en el continente de 63.6% a noviembre.

En defensa de los alarmantes números, Maduro insistió que todas las vicisitudes por las que atraviesa la economía venezolana se deben a una “guerra económica” promovida por sectores empresariales nacionales e internacionales a la que ahora se suma la bajada en los precios del petróleo, una caída por la que responsabiliza a Estados Unidos.

“Todas estas dificultades nos van a permitir reordenar con mayor rigurosidad, exigencia y disciplina los gastos del Estado, la inversión social, la inversión económica, la estrategia de crecimiento real, el logro de resultados en el desarrollo y el crecimiento de la economía”, agregó.

En esa línea, para el nuevo año el país sudamericano propone un plan de recuperación económica que incluye un nuevo sistema de control de cambio, más inversión social y recortes del gasto público.

Planificación

Maduro explicó que el plan de recuperación, que arranca el 3 de enero, se hará en tres escalas: a seis meses, dos y cuatro años. Además, que impactará sobre las variables de crecimiento, la inflación inducida y hará frente a la caída del precio del petróleo que ya se sitúa por debajo de los $47 por barril.

Entre las líneas de acción se incluye el nuevo sistema cambiario, una reforma fiscal y la optimización del gasto público, el cual incluye el recorte de gastos en las embajadas “que funcionen con lo estricto necesario” y fortalecer las reservas internacionales.

El Presidente indicó que como parte de estos objetivos figura el “perfeccionamiento del modelo económico social de distribución de la riqueza”.