A falta de compradores locales para sus condominios, las desarrolladoras inmobiliarias norteamericanas buscan seducir a los inversores de América Latina.
En las empresas constructoras con base en el Estado de Florida afirman que el mercado inmobiliario mundial cambió y que no les quedó otra opción que cambiar su modelo de negocios. “El mundo se dio vuelta. Hace 5 o 6 años, el precio del metro cuadrado en las mejores zonas de Buenos Aires o San Pablo rondaba los 2,500 dólares y hoy no baja de los 5,000, mientras que la situación inversa se dio en Miami”, señaló Carlos Rosso, presidente de la división de Condominios de la desarrolladora The Related Group.
La empresa con base en Miami está abriendo una oficina en Buenos Aires y debutará en el mercado local con dos lanzamientos. El primero es un edificio de 49 unidades en una playa al norte de Bal Harbour, que saldrá a la venta a 3,500 dólares por metro cuadrado y un precio por departamento que partirá de los 800,000 dólares. El segundo proyecto es un condominio de 192 unidades, en el área de Brickell, que se venderá a un valor de US$ 2500 por metro cuadrado.
“Para vender estos condominios adaptamos nuestro esquema al modelo de compra desde el pozo, típico de la Argentina, y estamos pidiendo 20% al momento de la firma del contrato y el resto se irá financiando durante la obra hasta completar los pagos en el momento de la entrega de los departamentos. La gran ventaja que ofrece Miami pasa no sólo por los precios sino también por que no hay inflación y los pagos no están ligados a la evolución del costo de la construcción”, señaló Rosso.