El costo de la canasta básica de alimentos (CBA) continúa en ascenso y afecta cada vez más el poder adquisitivo de los hogares hondureños. A mayo de 2025, la CBA se ubicó en 12,884.1 lempiras, lo que representa un aumento interanual de 635 lempiras en comparación con el mismo mes de 2024, según un informe de la Dirección General de Salarios, adscrita a la Secretaría de Trabajo y Seguridad Social (STSS).
Este incremento implica que cada miembro de una familia de cinco personas debió destinar en promedio 2,576.8 lempiras para adquirir los 30 productos que componen la canasta.
En mayo de 2024, el valor total de la CBA era de 12,249 lempiras, con un costo per cápita promedio de 2,249.8 lempiras.
Durante el primer trimestre de 2025, el precio de la canasta se estimó en L12,556.1. Al cierre del último año (junio 2024 a mayo 2025) se reportó un valor de L12,344.5, lo que se traduce en un costo promedio per cápita de 2,468.91. En ese periodo hubo alzas acumuladas de L285.28 y reducciones por L199.15.
Sin embargo, lejos de disminuir, el precio de la canasta ha mostrado una tendencia al alza en los primeros cinco meses de este año, acumulando un aumento de 460 lempiras. En contraste, durante el mismo período de 2024, el alza fue apenas de 80 lempiras, con una reducción adicional de 60.5 lempiras.
Déficit y capacidad de compra
Martín Barahona, economista, advirtió que el salario mínimo apenas permite cubrir los costos alimentarios, dejando a las familias con serias limitaciones para satisfacer otras necesidades.
“Una persona que tenga el salario mínimo probablemente tenga alguna capacidad de comprar los alimentos básicamente, y puede ser que le quede un déficit o no le alcance para satisfacer otras necesidades no alimenticias”, afirmó.
Barahona agregó que “en promedio en Honduras más o menos un 40% a 45% de la población no alcanza ni siquiera ese nivel de ingresos del salario mínimo, sino que se queda a la mitad”.