27/12/2025
02:19 PM

Finanzas, con escaso margen de maniobra

Reducir gastos y mejorar los ingresos son clave para enderezar el rumbo financiero.

Cuando el nivel de gastos duplica el de los ingresos, cualquier administración pública está en problemas, y cuando las opciones para revertir esa situación son escasas, se enfrenta un desafío grande.

De acuerdo con diversos analistas, esa es la situación que le aguarda al nuevo ministro de Finanzas, que tendrá un muy estrecho margen de maniobra para enderezar el rumbo de las finanzas públicas.

“Los principales problemas financieros del país son dos: el déficit fiscal y la deuda, tanto externa como interna”, explica el economista Julio Gom, para quien, en lo que se refiere a déficit fiscal, lo mejor que se ha logrado es reducir el ritmo de gasto, pero no se ha reducido. “En el flujo de ingresos la situación se plantea como muy grave, porque no alcanzan al nivel de gasto corriente”, menciona.

Datos de la Tesorería General de la República indican que el nivel de gasto mensual del Gobierno ronda los 6,000 millones de lempiras, mientras que el nivel de ingresos promedia alrededor de 3,000 millones, es decir, apenas la mitad de lo que se gasta.

Un análisis realizado por el Foro Social de Deuda Externa y Desarrollo de Honduras, Fosdeh, indica que en últimas fechas la situación ha tendido a empeorar.

Raf Flores, subcoordinador del Fosdeh, dijo que “revisando las últimas cifras del Presupuesto 2012, encontramos que el nivel de gasto está por encima de la capacidad de financiarlo.

En los primeros 41 días de este año encontramos que el gasto registrado por Finanzas supera los 12,000 millones de lempiras, de los cuales, un poco más de 7,000 millones son gastos extrapresupuestarios, porque el gasto dentro del presupuesto es de 5,000 millones”.

En lo que respecta a la deuda a nivel interno, el Fosdeh maneja la cifra de 47,000 millones de lempiras, con el agravante de que se trata de deuda a corto plazo, con tasas de interés que varían entre el 8 y el 11% en promedio anual, lo que demandará de los próximos presupuestos “hasta un 20% del gasto para cubrir el vencimiento de esa deuda”, estimó Flores.

El resto de la economía también sufre las consecuencias de esta situación. “En esta situación la economía se ve afectada porque el Gobierno encarece el sistema económico al captar dinero y usarlo improductivamente, le resta dinero al sistema económico”, explica Gom, ya que para financiarse, el Gobierno tiene que recurrir a toda fuente de recursos disponibles, en este caso, la liquidez que se encuentra en el sistema financiero, la cual, al haber una mayor demanda, tiende a encarecerse.

Buscando soluciones

La búsqueda de soluciones no resulta fácil, y encontrarlas requiere tomar decisiones de gran trascendencia. “Se ocupa mano firme y disciplina, y atender los gastos que son prioritarios y dentro del presupuesto”, apunta Flores.

El analista Carlos Urbizo, en su receta para mejorar la situación fiscal, recomienda entre otras cosas, privatizar algunos bienes del Estado, como las empresas estatales. “Si el Gobierno vende la Enee puede recibir mucho dinero con el cual cubrir el déficit”, explica el analista, quien agrega que el aparato estatal urge de una reestructuración, a la vez que no descarta un mayor nivel de endeudamiento interno siempre que se utilice de manera inteligente, en actividades de inversión que generen un retorno al país.

Por otro lado, el economista Raúl Reina propone estimular el crecimiento económico mediante incentivos fiscales.

“Cuando se bajan los impuestos, la gente tiene más incentivo de pagarlos, es una medida que ha funcionado en todas las economías en las que se ha efectuado”, asegura.

Otra estrategia propuesta por Reina es el redireccionamiento de recursos. “La administración central tiene un presupuesto de 80,000 millones de lempiras y la represa El Tablón solo cuesta 2,400 millones, es decir, el 3% de ese presupuesto.

Ese proyecto va a proteger la zona más rica de Honduras y como beneficio adicional va a recuperar 45,000 hectáreas de tierras de cultivo”, ejemplificó.

A todo esto, Flores agrega que se hace imprescindible superar los malos hábitos que han plagado el desempeño financiero del Estado, como el elevado nivel de gasto extrapresupuestario y las contrataciones directas, las cuales encarecen exponencialmente los costos de los proyectos en comparación a si se llevaran a cabo mediante licitaciones o concursos.

Sin control del déficit y la deuda, el país seguirá dando tumbos en materia financiera, y si bien la tarea parece titánica y tomara mucho tiempo terminarla, lo mejor que se puede hacer es comenzar de una vez, apuntan.