No podía faltar en Rusia. De ninguna forma. Uruguay tenía claro que la yerba mate era indispensable y no ha escaseado en las provisiones.
La delegación voló hacia el Mundial con 180 kilos de yerba mate y otros cien de dulces, entre membrillo, batata y leche. En este último caso, para entrar los 30 kilos de dulce de leche han necesitado un permiso especial. Hasta el Ministerio de Ganadería se movilizó para obtener ese documento.
Es muy habitual ver a los uruguayos pegados a su mate a todas horas. Son los principales consumidores del planeta. Los futbolistas no son una excepción y han querido asegurarse que no tendrán problemas para disfrutarlo.
La yerba mate, como el café, es un estimulante del sistema nervioso central. Además, aporta vitaminas y nutrientes, muy favorables a la práctica deportiva. Y, por lo que parece, también es talismán para el combinado uruguayo en este Mundial.