Cleveland, EUA.
Una escalofriante escena enmudeció anoche a la NBA en su partido inaugural de la temporada 2017-2018. A penas pasaban los cinco minutos de juego cuando en una aparatosa caida el alero Gordon Hayward se fracturó el tobillo izquierdo al caer y dejar atónitos a sus compañeros y aficionados.
Al caer tras el salto, el tobillo izquierdo de Hayward giró en un ángulo tan extraño que los compañeros de equipo se quedaron en estado de shock mientras pedía ayuda desde la línea lateral.
Compañeros de equipo y jugadores de los Cavaliers, incluyendo al alero LeBron James, acompañaron a Hayward para darle ánimos cuando lo sacaron del campo en camilla con toda la pierna izquierda inmovilizada y en medio de una ovación de los seguidores de los Cavaliers puestos de pie.
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El escolta de los Cavaliers, Dwyane Wade, se arrodilló y se llevó la mano a la cabeza mientras los médicos del equipo atendían a Hayward.
Hayward abandonó la cancha en una camilla y con la pierna izquierda inmovilizada bajo el cuidado de los médicos de los Celtics.
En julio, los Celtics ficharon a Hayward, de 27 años, con un contrato de cuatro años y 128 millones de dólares.
Los Celtics lideraban 9-12 cuando Hayward abandonó. EFE
