Insólito y repudiable acto de violencia se vivió este fin de semana en Honduras durante el partido de reservas entre Olimpia y Motagua en Tegucigalpa.
Resulta que un árbitro hondureño fue amenazado a través de una pistola en el clásico capitalino que disputaron los jovénes.
El “Ciclón” estaba doblegando a los “leones” en un compromiso que culminó en igualdad de goles. Los dirigidos por el exjugador Hernaín Arzú lo estaban ganando, pero el 3-3 llegó en favor de Olimpia que terminó sumando una unidad en el encuentro.
Una vez finalizado el partido, un supuesto padre de familia de un jugador del Motagua se acercó al réferi y con el brazo derecho le dio un codazo en el rostro tras recriminarle.

El reclamo del árbitro hondureño no se hizo esperar, y segundos después el personaje de género masculino se sacó un arma de fuego de su cintura y apuntó al tocapitos.
Los momentos de zozobra fueron intensos en el que varias personas intentaron calmar al hombre que, tras un arrebato de ira, estuvo a punto de cometer un acto ilícito en partido de ligas menores.
Posteriormente, el réferi terminó insertando en el acta arbitral el complicado momento en duelo que se desarrolló en Tegucigalpa.