El estado de salud del lateral izquierdo Antonio Puerta ensombrece una de las citas más importantes del Sevilla, que tiene la oportunidad de entrar de lleno en la presente edición de la Liga de Campeones, pero viajó a Atenas para medirse al AEK con la mente puesta en un hospital sevillano.
Ni el interés del Tottenham inglés por contratar al técnico Juan de Ramos, ni la polémica con el brasileño Daniel Alves y sus ganas de dejar el equipo parece haber desestabilizado a un conjunto que ya se ha adjudicado con rotundidad la Supercopa de España ante el Real Madrid y que ganó la ida de la eliminatoria europea ante el AEK por 2-0.
Lo que sí tiene descentrados a los sevillistas es la salud del canterano Puerta, ingresado en la UCI del Hospital Virgen del Rocío tras sufrir el sábado en el partido ante el Getafe un desvanecimiento sobre el terreno de juego y varios paros cardiorrespiratorios.
Alves también se encontraba entre los citados, pero ayer no se presentó en el aeropuerto de San Pablo, por lo que es baja y desata una guerra abierta con el club.
Puerta sigue en 'estado crítico'. 'La situación del paciente, después de 36 horas de ingreso, sigue siendo crítica como consecuencia de los graves trastornos ocasionados por la parada cardíaca', afirma el parte médico emitido ayer.
Según este informe, el paro cardíaco que sufrió el jugador 'ha sido prolongado y con sufrimiento cerebral', por lo que todavía es pronto 'para conocer si la recuperación puede ser total o si quedan secuelas'.
Según los médicos, el origen del problema de Puerta está en 'una displasia arritmogénica del ventrículo derecho', muy difícil de detectar.
'Lo único realmente positivo es que no haya empeoramiento', concluye el parte médico.
Antecedente
La situación de Puerta recuerda la trágica muerte del camerunés Marc-Vivien Foé, de 28 años, después de sufrir una crisis cardíaca en 2003, en un partido Camerún-Colombia en Francia.