13/06/2025
12:01 AM

Para San Luis no hay mañana

Los Cardenales regresan hoy a casa contra la pared. Un triunfo de los Rangers de Texas los hace campeones del béisbol.

Para seguir respirando en la Serie Mundial, los Cardenales de San Luis necesitarán que Jaime García repita su magnífica actuación de hace una semana. Para los Rangers de Texas, el peor enemigo puede ser la ansiedad al encontrarse a un paso de un inédito campeonato.

Al regresar el clásico de otoño a San Luis, el desempeño del zurdo mexicano de 24 años será esencial el miércoles para que los Cardenales puedan forzar un séptimo y último partido, algo que no se produce desde que los Angelinos de Anaheim derrotaron a los Gigantes de San Francisco en 2002.

“Uno se prepara para cuando le toque”, dijo García, cuya apertura en el segundo juego marcó apenas la primera de un lanzador mexicano desde que Fernando Valenzuela lo hiciera con los Dodgers de Los Ángeles en 1981. “Estoy motivado totalmente, preparado para entregarlo todo”.

Pero el juego está en veremos debido a un pronóstico de 80% de posibilidad de lluvia.

García se fue sin decisión tras lanzar brillantemente durante siete innings en los que no permitió carreras y sólo le conectaron tres hits. La victoria se le negó cuando el bullpen de San Luis no supo preservar en el noveno una ventaja 1-0 y Texas acabó imponiéndose 2-1.

Los Cardenales deberán remontar un 3-2 en contra en la serie si quieren conquistar su undécimo campeonato de las Grandes Ligas.

Es algo que han logrado varias veces en el pasado en cuatro de cinco ocasiones. También deben tomar en cuenta que los Rangers no han sufrido derrotas consecutivas desde el 23-25 de agosto contra Boston, cuando perdieron en casa los tres últimos partidos de una serie de cuatro.

“No te niego que es una situación incómoda, es muy dura”, comentó el primera base de los Cardenales, Albert Pujols. “Pero tenemos un sexto juego y debemos ganarlo para tener un séptimo”.

La última vez que los Cardenales ganaron los dos juegos finales de una serie que se fue al máximo fue en 1982 contra Milwaukee. Para las otras instancias, hay que remontarse a la época de antaño: en 1946 ante Boston, en 1934 contra Detroit y en 1926 frente a los Yankees de Nueva York.