El técnico nacional Víctor Manuel Bernárdez Calderón (de 66 años) sigue luchando por su vida en su humilde hogar de la colonia El Confite, de La Ceiba.
Sufrió en 2015 un derrame cerebral parcial que lo tiene semiparalizado y postrado en cama, está completamente ciego producto del glaucoma, además ha perdido por completo la memoria.
A pesar de sus limitantes no se aleja del fútbol y sigue al Vida, el club de sus amores, a través de la radio porque a raíz de su ceguera no los puede ver por televisión, pero su esposa Alicia trata de animarlo con los encuentros por radio.
Dilcia álvarez, esposa de Calderón, es su mano derecha y durante todo este tiempo no lo ha dejado solo, incluso tuvo que renunciar a su trabajo para atenderlo permanentemente porque sus hermanas lo han olvidado. Álvarez necesita ayuda de personas de buen corazón para la compra de medicamentos.
“El derrame cerebral le paralizó el cuerpo, con las terapias al principo logramos que se pudiera sentar, así lo movíamos en silla de ruedas, pero no ha tenido mejoría”, expresó.
Y añadió: “Lo más difícil todo este tiempo es permanecer sola con él porque no tengo ayuda de nadie, a mí me toca movilizarlo hasta cuatro veces al día, la situación económica es complicada”.
Calderón cumple un año y tres meses de luchar por su vida
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'Físicamente no creo que se recupere ya perdió completamente la razón, solo tiene en mente el nombre de sus hermanas, a quienes llama pero no llegan a visitarlo ellas son Mirta, Gilma y Liliana”, contó.