REDACCIÓN. Hablar de sexo y todo lo que esto implica con los adolescentes aún es un tabú en muchos hogares hondureños, puesto que existe una cultura conservadora que, lamentablemente, no siempre resulta ser efectiva para educar a los niños en la actualidad.
En este sentido, es preciso aclarar que la sexualidad no solo tiene que ver con el acto de reproducirse, sino que representa la generación de deseos, sentimientos, fantasías y emociones; es decir, el desarrollo de una identidad sexual, que se puede definir como aquella parte de la identidad del individuo que le permite reconocerse y actuar como un ser sexual.
IMPORTANCIA
La psicóloga y sexóloga Ada Gabriela Mejía indica que, con los avances de la tecnología y el fácil acceso a contenidos sexuales, es normal que los niños en etapa escolar, incluso preescolar, comiencen a preguntarles a los padres por este tipo de cosas.
Por ello los padres deben estar preparados para no reaccionar sorprendidos o evadir el tema, ya que esto solo generará confusión y falta de confianza en el menor, lo que puede terminar en una situación peor.
Ahí radica la importancia de que los padres sepan afrontar esta situación y ayudar a los adolescentes a que aprendan a conocerse de forma saludable.
PREVENCIÓN
El primer aspecto que los padres deben tener en consideración es la prevención de la violencia sexual, afirma la experta, ya que este es un peligro existente en cualquier lugar, incluyendo la familia.
“Los niños deben comenzar su autoprotección desde muy chiquitos, deben aprender a conocer las partes de su cuerpo y aprender que son privadas”, afirma.
Además, sugiere que no se debe tener vergüenza para explicarles cómo se crean los bebés, ya que el cuento de la cigüeña ya está obsoleto en las nuevas generaciones.
Ya cuando se trata de un adolescente los padres están obligados a explicar las consecuencias de las relaciones sexuales como tal; es decir, embarazos no deseados, enfermedades de transmisión sexual, abortos y, por supuesto, el uso de anticonceptivos.
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EMOCIONES
La adolescencia media es la etapa en la que suelen producirse los primeros contactos físicos con otras personas (intercambios de besos y caricias) como una forma de exploración y aventura.
No obstante, es aquí cuando muchos jóvenes inician las relaciones sexuales que incluyen el coito y sin tener la madurez y responsabilidad requerida.
Esto puede ser un derivado de los enamoramientos intensos y apasionados propios de su edad, mismos que suelen tener corta duración y, por lo tanto, pueden repercutir en el aspecto emocional del adolescente.
Por tal razón, la doctora Mejía reitera la importancia de criar a los hijos con valores morales y éticos para que puedan cuidarse y respetarse ante cualquier situación que vulnere su integridad.
OTROS ASPECTOS
La exposición a los contenidos altamente sexuales es inevitable, la única manera de fomentar el bienestar y la seguridad de los hijos es prepararlos para enfrentar los cambios normales en sus cuerpos.
La presión de los amigos, los mensajes a través de la música y las producciones cinematográficas juegan un papel influyente que los padres deben vigilar en todo momento y no contrarrestar de manera ofensiva, sino comprensiva.
LA EDUCACIÓN SEXUAL INCLUYE
- Cambios en la pubertad (físicos y sociales).
- La identidad de género (se siente hombre, mujer, neutro).
- Las relaciones afectivas con la familia, amigos, pareja.
- La prevención de la violencia de género y la violencia sexual.
- Pornografía y prostitución.
- Enamoramiento y celos.
- Enfermedades de transmisión sexual.
- Los anticonceptivos y el aborto.
RESPONSABILIDAD PARENTAL
La doctora Ada Gabriela Mejía recomienda a los padres iniciar la educación sexual con sus hijos desde temprana edad. Los niños tienen que saber que nadie puede tocar sus genitales, además, lo correcto es referirse a sus partes íntimas con el nombre real, sin bromas y sin morbo.
Asimismo, los padres deben informarse, tomar conciencia de que sus hijos están creciendo y necesitan ser guiados en esta etapa para desarrollarse plenamente.