Estados Unidos.
Arizona impresiona por la reciedumbre de sus paisajes tallados por el vigor de vientos que circularon mucho antes de la aparición del primer ser humano y la fuerza de torrentes que, a través de avenidas con millones de años, esculpieron algunos de los más grandiosos monumentos naturales del planeta.
Múltiples factores coincidieron para que se crearan escenarios que muestran estratos, sedimentos y yacimientos en formaciones alucinantes.
La majestuosidad de este escenario natural, el juego de luces en alboradas y crepúsculos y el contraste de nubes, rocas y dunas han sido aprovechados por la industria cinematográfica, comenzando con las películas del director John Ford y el actor John Wayne.
Conforme se recorre Arizona, se descubren espléndidos parajes, como las formaciones de roca y arena rojizas de Sedona y sus frondosos bosques circundantes, atributos a los que hay que agregar un clima excepcionalmente benévolo.
Desde la carretera, la famosa Ruta 66, se ven escenográficas visiones que cobran rangos superlativos cuando se ha llegado al Parque Valle de los Monumentos (Monument Valley), manejado por la Nación Navajo.
Hay senderos que se pueden recorrer con un permiso especial, pero nada mejor que hacerlo en vehículos especiales y con la guía de quienes conocen mejor esta tierra: los propios navajos, quienes durante los trayectos suelen tocar flautas o tambores para acompañar sus cantos en plena armonía con el paisaje.
Arizona impresiona por la reciedumbre de sus paisajes tallados por el vigor de vientos que circularon mucho antes de la aparición del primer ser humano y la fuerza de torrentes que, a través de avenidas con millones de años, esculpieron algunos de los más grandiosos monumentos naturales del planeta.
Múltiples factores coincidieron para que se crearan escenarios que muestran estratos, sedimentos y yacimientos en formaciones alucinantes.
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La majestuosidad de este escenario natural, el juego de luces en alboradas y crepúsculos y el contraste de nubes, rocas y dunas han sido aprovechados por la industria cinematográfica, comenzando con las películas del director John Ford y el actor John Wayne.
Conforme se recorre Arizona, se descubren espléndidos parajes, como las formaciones de roca y arena rojizas de Sedona y sus frondosos bosques circundantes, atributos a los que hay que agregar un clima excepcionalmente benévolo.
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Desde la carretera, la famosa Ruta 66, se ven escenográficas visiones que cobran rangos superlativos cuando se ha llegado al Parque Valle de los Monumentos (Monument Valley), manejado por la Nación Navajo.
Hay senderos que se pueden recorrer con un permiso especial, pero nada mejor que hacerlo en vehículos especiales y con la guía de quienes conocen mejor esta tierra: los propios navajos, quienes durante los trayectos suelen tocar flautas o tambores para acompañar sus cantos en plena armonía con el paisaje.
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