¿Por qué hacer la vida fácil pudiéndola complicar? Esta frase que solían decir los abuelos para subrayar la tendencia de enredarnos con cosas sencillas, cae como anillo al dedo a la nueva realidad del sistema bancario.
Antes, para hacer cualquier transacción bancaria debíamos desplazarnos físicamente hasta una sucursal del banco y hacer filas, la mayoría de veces interminables.
Pero hoy, con los servicios que ofrece la banca móvil, podemos realizar múltiples transacciones sin salir de casa.
¿Pagar la tarjeta de crédito? ¿Verificar el saldo de la cuenta? ¿Realizar un abono al crédito de vivienda? ¿Pagar la pensión del colegio de los hijos? ¿Pagar la cuota de la nuestro plan médico? ¿Comprar el regalo para mamá? Sí, todo ello desde la comodidad del hogar, mientras se disfruta de una buena película, o desde la oficina, en medio de la jornada laboral.
Es posible hacerlo a través de su computador o un dispositivo móvil, con agilidad –en apenas unos minutos- y con amplios márgenes de seguridad y confiabilidad.
La firma Evertec, que procesa 2,1 millones de transacciones al año en América Latina, señala la seguridad como una de las mayores ventajas de realizar transacciones vía banca móvil y añade que este tipo de operaciones están protegidas gracias a la avanzada tecnología bancaria y a los cada vez más blindados procesadores de pagos.
Los bancos invierten grandes cifras en la seguridad de sus plataformas electrónicas y, de hecho, es la banca de América Latina la que más invierte en seguridad, según Elis Martínez, gerente para Latinoamérica de VMware, compañía experta en infraestructura de cloud y ciberseguridad.
Sin embargo, el tema de la seguridad es una de las razones por la cual los 'novatos' en el uso de la banca móvil se resisten a utilizarla.
¿Cómo dejar atrás los temores y “hacerse la vida fácil” haciendo uso de este recurso, con seguridad y confianza?
He aquí cinco consejos elementales que ofrecen los expertos para realizar transacciones de forma más segura:
1- Usar la aplicación móvil de su banco: lo más aconsejable es buscar directamente en la página web del banco las indicaciones para descargarla y no hacerlo a través de buscadores tradicionales de Internet, por muy conocidos que sean.
2- Utilizar contraseñas seguras en las que se combinen letras y números: en lo posible diferentes a las que usan para el mail o de las redes sociales. Los bancos suelen pedir a sus clientes dos claves; una para ingresar como usuario y otra para realizar transacciones como pagos o transferencias de dinero.
3- Utilizar la red doméstica para realizar cualquier transacción online: y evitar hacer operaciones bancarias desde redes públicas. ¡Ah! Y no olvidar cerrar la sesión una vez finalice su transacción.
4- No hacer caso a supuestos correos de su banco en el que le piden las claves de seguridad con las que accede a sus cuentas u otras informaciones de carácter personal.
5- Actualizar regularmente las aplicaciones del teléfono celular y comprobar la configuración de seguridad del dispositivo, la primera de las cuales es contar con un código de seguridad para acceder a éste.