Comayagüela, Honduras.
“Yo creo que mi hija se quiso meter a la casa, porque quedó tirada en la puerta”, dijo conmovida Sandra Yamileth Cruz, madre de la joven Heydi Gabriela López Cruz, quien fue asesinada supuestamente por policías militares.
La joven perdió la vida la noche del sábado a manos de elementos de la Policía Militar del Orden Público (PMOP) en la colonia Villafranca de Comayagüela.
'Pido que se haga justicia, aunque se que ya no me van a devolver a mi hija”, comentó entre lágrimas Cruz.
Cómo sucedieron los hechos
Eran alrededor de las 11:00 de la noche cuando los cuatro elementos de la PM asignados a la posta de la colonia Villa Cristina llegaron a la pulpería de Orlando Padilla y por razones no especificadas comenzaron a golpearlo con la culata de los fusiles que portaban.
Heydi Gabriela dormía en la segunda planta de su casa, y al escuchar la bulla salió a la terraza a ver qué sucedía junto con su padre Jorge López y otros familiares.
Al ver cómo los uniformados golpeaban a Padilla, ellos gritaron desde lo alto que lo dejaran; sin embargo, uno de ellos cargó el fusil y comenzó a disparar en diferentes direcciones, de acuerdo con los parientes de la joven asesinada.
“Yo creo que mi hija se quiso meter a la casa, porque quedó tirada en la puerta”, dijo conmovida Sandra Yamileth Cruz, madre de la joven Heydi Gabriela López Cruz, quien fue asesinada supuestamente por policías militares.
La joven perdió la vida la noche del sábado a manos de elementos de la Policía Militar del Orden Público (PMOP) en la colonia Villafranca de Comayagüela.
'Pido que se haga justicia, aunque se que ya no me van a devolver a mi hija”, comentó entre lágrimas Cruz.
Cómo sucedieron los hechos
Eran alrededor de las 11:00 de la noche cuando los cuatro elementos de la PM asignados a la posta de la colonia Villa Cristina llegaron a la pulpería de Orlando Padilla y por razones no especificadas comenzaron a golpearlo con la culata de los fusiles que portaban.
Heydi Gabriela dormía en la segunda planta de su casa, y al escuchar la bulla salió a la terraza a ver qué sucedía junto con su padre Jorge López y otros familiares.
Al ver cómo los uniformados golpeaban a Padilla, ellos gritaron desde lo alto que lo dejaran; sin embargo, uno de ellos cargó el fusil y comenzó a disparar en diferentes direcciones, de acuerdo con los parientes de la joven asesinada.
Los cuatro militares permanecen presos mientras continúan las investigaciones.
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