En juicio oral y público, el Tribunal de Sentencia de La Ceiba resolvió declarar culpable al cabecilla del narcotráfico Héctor Raúl Amaya Solís, quien guarda prisión en la Granja Penal.
Amaya Solís fue capturado en San Juan Pueblo, Atlántida, en un operativo efectuado el 6 de febrero de 2005 por fiscales contra el Crimen Organizado, agentes de la Dirección de Lucha contra el Narcotráfico, Dlcn, policías de investigación y miembros del Ejército.
En dichos allanamientos fueron capturados su esposa Digna Isabel Hernández e hijos. Se le encontró en posesión de 2.5 kilos de cocaína y algunas pertenencias, entre ellas, ocho vehículos y su casa de habitación fueron incautadas.
Petición
Las acusaciones en un comienzo se hicieron por los delitos de lavado de activos y posesión y tráfico de drogas, al final del juicio prevaleció únicamente lo relacionado a la droga.
“La acusación del Ministerio Público se hizo por tráfico ilícito de drogas agravado, en donde se pedía una pena calculada entre 20 y 26 años y seis meses”, dijo el fiscal del Ministerio Público, Félix Moreno.
Luego de esta captura, la Fiscalía contra el Crimen Organizado interpuso una acusación criminal en contra de Amaya Solís por narcotráfico, por lo cual fue condenado, informó el director de la Dlcn, Julián Arístides González.
La Policía de investigación y la Dlcn incautaron joyas, dinero, armas entre otros artículos.
Libres
El tribunal fijó para el próximo 16 de febrero la lectura de la individualización de la pena. El Código Penal sanciona el delito de narcotráfico de 15 a 20 años de cárcel, más un millón de lempiras de multa, entre tanto que la facilitación de local es penada con de 7 a 10 años de prisión.
En ambos casos, la Fiscalía pedirá que se aplique la pena máxima en contra de los implicados. Por este caso se interpuso, además, requerimiento fiscal por narcotráfico contra Digna Isabel Hernández Caballero, Róger Leonel Amaya y José Luis Hernández, esposa e hijos de Amaya Solís, respectivamente.
El Tribunal de Sentencia determinó absolverlos de los cargos y la Fiscalía contra el Crimen Organizado apelará esta resolución.
Amaya Solís es considerado como el cabecilla de una red que operaba en el norte.
Según las investigaciones, este individuo abastecía redes de “narcomenudeo” de la capital, afirmó el director de la Dlcn.
Los jueces que conocieron el caso amparados en las evidencias y en los argumentos presentados por la defensa y el la fiscalía, determinaron dejar en libertad a la esposa de Raúl Amaya, la señora Digna Isabel Hernández.
“Se va analizar el recurso de casación para ver si recurrimos a ello”, dijo el fiscal, quien podría presentar ese argumento una vez obtenida la sentencia.
Liberados
También fueron dejados en libertad Róger Amaya y Luis Hernández, ambos familiares de la pareja, los que guardaban prisión desde el momento de la captura.
