Primos eran los dos jóvenes asesinados el jueves en una colonia del sector Chamelecón.
Los ahora occisos respondían a los nombres de Melvin José Romero Vicente (de 28 años) y José Isaías Madrid Vega (de 23), quienes trabajaban como descargadores de bloques para una empresa constructora de la ciudad, función que desempeñaban mientras fueron ultimados por pandilleros.
Conforme a la versión de la Policía Nacional, fueron privados de su libertad por los antisociales, quienes los llevaron hasta una “casa loca” para torturarlos y posteriormente matarlos a balazos.
“No se metían con nadie”
Parientes que llegaron hasta la morgue judicial a reclamar los cuerpos dijeron que los muchachos no tenían ningún tipo de vínculo con estructuras criminales, los definieron como jóvenes tranquilos y luchadores que desde temprana edad trabajaron para ayudar en sus hogares.
Madrid Vega deja dos niños: uno menor de un año y otro de tres, mientras que Romero Vicente era el encargado de cubrir con parte de los gastos de su madre, que se encuentra postrada en cama debido a una enfermedad terminal.
“Mis primos eran tranquilos, andaban trabajando cuando les pasó esto. No se metían con nadie, no entendemos cómo estas personas pueden matar a cualquiera. Esperamos que las autoridades hagan su trabajo y den con los responsables de las muertes”, dijo una prima de los fallecidos.