El joven que murió el sábado en la madrugada habría sido ultimado por dos policías de tránsito de Villanueva.
Según el informe presentado por la Policía Nacional Preventiva y la Dirección Nacional de Investigación Criminal, Dnic, el joven Allan Alexander Murillo Velásquez, 24, habría sido muerto a balazos por dos agentes de la Policía de Tránsito de Villanueva, identificados sólo como Obando y López, quienes, se presume, andaban vestidos de civil la madrugada del sábado en un bar-discoteca de la misma ciudad.
Muerte
Según la información que los parientes de Murillo brindaron a la Dnic, la madrugada del sábado, mientras el hoy fallecido se encontraba en un centro de baile, surgió un problema personal con uno de sus amigos y Murillo intervino para evitar el pleito.
No obstante, él y su amigo fueron raptados al salir del bailable, presuntamente por los agentes policiales. Luego frente al establecimiento nocturno le dispararon a Murillo y subieron a los jóvenes en un vehículo del cual no reportaron características.
Murillo, que iba en estado crítico debido a los balazos, fue tirado en una calle que conduce a la colonia San Ramón y su amigo corrió con mejor suerte, pues, según los parientes del hoy occiso, sólo recibió una brutal paliza de los hechores, que lo dejaron casi inconsciente.
Luego de compartir por varias horas con un grupo numeroso de amigos en un restaurante de mariscos, Murillo decidió acompañarlos al establecimiento, sin imaginar que no regresaría a su hogar en la colonia Villas del Sol.
Murillo salió de su casa el viernes alrededor de las 6.30 de la tarde después de recibir una llamada en la que uno de sus amigos lo invitó a cenar. Después de comer partieron hacia el bar donde horas más tarde perdería la vida.
