La jornada prometía ser agotadora. Limpiar un pozo malacate de más de 12 metros no era tarea fácil, pero permitiría que la familia Guillén se agenciara unos lempiras para comprar la provisión semanal.
Todo transcurría con normalidad, pero la situación dio un giro brusco ayer a eso de las tres de la tarde, en el sector conocido como 'La Barranca', propiedad de José Raúl Serrano, en la carretera que conduce desde Pimienta a la aldea de Santiago.
Amarrados a un lazo, los jóvenes jornaleros y albañiles Elvin, Marlon y Erlin Guillén, más una persona no identificada, limpiaban el pozo malacate.
El peso de las cuatro personas cuando estaban en plena faena hizo que la cuerda cediera y los hombres cayeran en el fondo del pozo. Al ver lo que ocurría, Rodolfo Guillén López, 60, padre y tío de los jóvenes, que se encontraba en las afueras apoyando a los muchachos, trató de ayudarlos y logró sacarlos con ayuda de otras personas que se unieron al rescate. El sexagenario puso a salvo a Elvin Guillén y a otro hombre del que no precisaron el nombre. También sacaron con vida a Erlin Medardo Guillén. Los tres fueron trasladados al hospital Mario Catarino Rivas, pero Erlin falleció. Su cuerpo fue llevado a la morgue judicial.
Marlon Alexander Orellana, 17, no sobrevivió y murió en la escena, supuestamente por golpes. Luego de rescatar a sus hijos, Rodolfo Guillén López murió, según sus parientes de un paro cardíaco, pues no cayó en el fondo del pozo.
Los cuerpos de Rodolfo y Marlon fueron llevados a la posta policial de Pimienta adonde llegaría Medicina Forense a realizar el levantamiento correspondiente. La causa de muerte se desconoce.
Otra tragedia en la capital
La buena intención que tenía Rafael Mencía Ulloa, de 33 años, de enseñar a nadar a sus sobrinos y a dos vecinos se convirtió en tragedia. Al parecer a Ulloa le dio un calambre y eso sería la causa de su ahogamiento, lamentaron sus parientes.
De interés
La Policía estaba anoche realizando las investigaciones del caso. Los parientes dicen que es un mero accidente de trabajo.
