Tegucigalpa, Honduras
Los menores infractores de la mara 18 recluidos en el Comando de Operaciones Especiales (Cobras) se amotinaron ayer.
Según representantes de instituciones que tuvieron acceso al lugar, la reyerta se originó porque los agentes Cobras ingresaron a los módulos donde se encuentran los menores infractores para hacer un registro de rutina en cada una de las habitaciones.
Esta acción provocó irritación entre los mareros, quienes reaccionaron quemando un colchón y con eso provocaron desorden en las instalaciones policiales. Con el objetivo de controlar la situación, los agentes de inmediato lanzaron bombas lacrimógenas, lo que permitió apaciguar a los infractores que iniciaron con el amotinamiento que un en principio trascendió que había sido un intento de fuga, pero ese extremo fue descartado por las autoridades policiales.
Casi de inmediato se levantaron cortinas de humo producto de que los agentes lanzaron los gases lacrimógenos, por lo fue necesario la presencia de miembros del Cuerpo de Bomberos y Cruz Roja, quienes estaban prestos para auxiliar o trasladar a los menores a los centros asistenciales, en caso de que resultaran heridas en el amotinamiento.
Desde larga distancia se podía observar una cortina de humo gris producto de los artefactos que habían lanzado los policías en contra de los reclusos para abortar el plan de salir de las celdas.
Estas unidades fueron acondicionadas para ser habitadas por los menores infractores de mayor peligrosidad, en este caso los integrantes de la mara 18 que habían estado en el centro Renaciendo, ubicado en el Támara. En los Cobras hay 40 menores infractores recluidos.
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