Las ráfagas que se escucharon en el barrio El Nene, de El Porvenir, San Manuel, Cortés, despertaron a los vecinos. La balacera, según relataron testigos, duró unos cinco minutos.
Tras el ataque, el sonido de un carro que arrancó a toda velocidad indicaba que los asesinos huían. Los vecinos salieron y descubrieron que en la vivienda de la familia Martínez los cuerpos de tres hombres quedaban tendidos, uno en la sala y dos en el dormitorio.
Las víctimas fueron identificadas como Jonathan Josué Mejía Martínez (17), Gustavo Enrique Martínez Murillo (20) y Javier Antonio Martínez Murillo (35), quien trabajaba reparando celulares en la comundiad. Un primo que les acompañaba logró salvarse y fue identificado como Denis Alexander Martínez Murillo, pero nadie hasta ayer sabía de su paradero.
Las autoridades forenses llegaron al lugar cinco horas después del ataque. Los agentes de Inspecciones Oculares de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (Dnic), recolectaron varios casquillos de Ak -47 que quedaron dispersos dentro y fuera de la casa.
Los cadáveres de los tres hombres fueron trasladados a Medicina Forense para la autopsia. Ni familiares, ni la Policía establecieron una causa sobre el hecho. El caso -afirmaron- será investigado y las declaraciones de testigos, amigos y parientes será clave para obtener pistas en este crimen.
Los hechos
Eran las 5:30 am de ayer cuando un carro -que no pudo ser identificado por familiares y testigos de la aldea- se estacionó frente a la vivienda de la familia Martínez.
Del vehículo bajaron cinco hombres armados, los que se fueron directo a la vivienda. Ellos no usaron la fuerza, tocaron la puerta y uno de los jóvenes abrió. Desde que ingresaron a la casa comenzaron a disparar contra los cuatro muchachos que a esa hora recién habían regresado de una fiesta que se desarrollaba en el centro comunal.
La lluvia de disparos provocó la muerte inmediata de tres de los Martínez, el cuarto logró saltar la ventana y huir de la casa para salvar su vida. Hasta ayer nadie de sus familiares ni amigos sabía adónde se encontraba Denis Alexander.
Milagrosamente, la abuela de dos de los fallecidos y madre de un tercero, logró salvarse porque a esa hora ella regresaba de una vigilia religiosa y eso evitó que fuera una de las víctimas de la balacera que perpetraron en el lugar los desconocidos.
“Es un dolor grande esta tragedia. No sabemos qué pasó con uno de los primos que estaba en la casa; pero huyó por salvarse. La abuela se salvó porque fue a la iglesia y cuando regresó se fue a la casa de al lado. No entendemos por qué los mataron, ellos no se metían con nadie”, dijo uno de los primos de los Martínez.
Los tres cuerpos estaban boca abajo, tenían disparos en la cabeza; dos primos estaban en un dormitorio y el tío Javier Antonio quedó tirado en la sala. En la casa y en el patio, los agentes de la Dnic encontraron casquillos de AK-47.
Investigación
Las autoridades policiales ayer recabaron los primeros elementos y evidencias para establecer un posible móvil en el caso; pero no tienen una pista concreta para determinar el motivo en las muertes.
“Estamos recolectando información y evidencias, pero serán las declaraciones de parientes y testigos las que nos ayudarán para tener elementos claros en el caso”, dijo uno de los investigadores.
El viernes en horas de la noche en La Sabana, San Manuel, mataron a dos cuñados: Jairo Manuel Castro Martínez (30) y Antonio López (18), quienes fueron asesinados por seis hombres cuando miraban el partido. Las autoridades analizan los dos hechos para determinar si hay relación en ambos casos.