Mientras el presidente Porfirio Lobo Sosa entregaba ayer canastas familiares en el sector Rivera Hernández, a unas pocas cuadras, en otra zona del populoso sector, delincuentes le quitaban la vida a un peluquero, supuestamente para robarle una computadora portátil que pretendía vender.
El hecho que conmovió a los vecinos de la 23 calle, entre 31 y 32 avenidas de la colonia 6 de Mayo, se produjo ayer a las 12:00 del día, en el que murió Erick Adony Rizo Yanes (27) de al menos ocho balazos.
La inseguridad en esa zona es evidente pese a la presencia militar en las calles y los patrullajes efectuados por los elementos del Ejército.
En la escena del crimen, los agentes de la unidad de Delitos Contra la Vida de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC) encontraron ocho casquillos de bala de calibre nueve milímetros que servirán como evidencias para las investigaciones.
Rizo Yanes residía en la colonia Central, a unas cuadras de donde murió, y tenía pocos minutos de haber salido de su vivienda con una computadora portátil que llevaba en sus manos con la intención de venderla, según los parientes que se acercaron al lugar cuando Medicina Forense efectuaba el levantamiento de ley en horas de la tarde.
La víctima tenía unos tres años de haber sido deportado de Estados Unidos, dijeron los dolientes.
