La alegría de una fiesta navideña que se celebraba en un restaurante capitalino se convirtió en llanto, desesperación y dolor cuando sujetos extraños armaron una balacera en la que perecieron dos de los invitados.
Fueron dos jóvenes quienes perdieron la vida la madrugada del domingo a manos de dos matones que se conducían en una motocicleta y que llegaron al lugar cuando la festividad estaba por terminar.
Las víctimas fueron identificadas como César Alexander Bonilla y Edwin Javier Vásquez de 20 años, el último originario y residente en el municipio de Santa Ana, Francisco Morazán.
Familiares de Edwin manifestaron que algunos compañeros de su hijo les dijeron que ya estaban por abordar los vehículos cuando llegaron los sujetos en una motocicleta, y luego de sostener una discusión con los jóvenes les dispararon a las dos víctimas y a una tercera persona que se encuentra interna en un centro asistencial.
“Mi hijo andaba en la fiesta navideña que les hizo la empresa Servicom”, dijo el acongojado padre de Edwin cuando llegó a reclamar su cuerpo a la morgue judicial.
Según informe policial, César murió en el acto. Edwin y el ahora sobreviviente fueron trasladados de emergencia a un hospital.
Edwin expiró. Su compañero se encuentra en estado delicado en un centro asistencial privado.
La madre de Edwin afirmó que la muerte de su hijo la deja en manos de Dios, ya que su vástago era una persona trabajadora y honesta que venía a Tegucigalpa sólo a trabajar.
Vásquez deja una niña de dos años en el lugar de origen de su padre.