Ese miércoles, María Santos Tábora Ramírez, 42, salió de su casa acompañada de su hijo Danilo Gabriel Murillo Tábora de apenas 10 años. Iban felices porque se dirigían a una reunión familiar en Morazán, Yoro. Abordaron el bus y emprendieron su trayecto, pero al llegar a Santa Rita, específicamente a la vuelta de La Casona, el viaje de convirtió en la peor de sus pesadillas.
Tres delincuentes entraron al bus, comenzaron a asaltar a los pasajeros. Hubo intercambio de disparos y María y Danilo resultaron heridos; sin embargo, minutos después la madre del menor murió.
El niño fue llevado gravemente herido a un centro asistencial adonde aún se encuentra en recuperación. En el percance dos personas más resultaron heridas de bala, un señor de 64 años y el policía Elías Ponce Morazán que viajaba de civil en la unidad e intentó detener a uno de los malhechores.
A la fecha, el crimen de doña María Santos, y el de muchas personas, es uno más en las estadísticas de la violencia en los buses llamados “ataúdes rodantes” ya que se han convertido en trampas mortales para los pasajeros.
Las muertes están a la orden del día, lo extraño es que, pese a que a diario aparecen en los titulares de periódicos y noticieros radiales y televisados, las autoridades no tienen una estadística real de lo que ocurre.
En los últimos diez días se han suscitado varios tiroteos dentro de las unidades de transporte, donde pasajeros en su intento por salvar sus pertenencias se han liado a tiros con los maleantes y han perdido la vida; así como también han ultimado a los asaltantes.
No denuncian
El coordinador regional del Ministerio Público, Rafael Fletes, manifestó que la mayoría de asaltos que se dan en las unidades de transporte no son denunciados. Dijo que los pasajeros se resignan a perder sus pertenencias. “No presentan las denuncias y los casos no quedan registrados; y eso permite que el delincuente actúe con impunidad”, aseveró el fiscal.
Agregó que no se descarta que los motoristas y los ayudantes de buses tengan nexos con los delincuentes.
El funcionario expuso que los asaltos en las unidades de transporte se vienen dando desde hace varios años. “Hay resistencia de parte de los pasajeros a ser despojados de sus pertenencias, lo que motiva a que haya cruces de disparos y se produzcan muertes entre maleantes y pasajeros”, expresó Fletes.
El togado lamentó que no haya un control para garantizarles la seguridad a los pasajeros. “Una medida podría ser controlar los puntos en las paradas a fin de que se registre a las personas que aborden las unidades para evitar el ingreso de armas en las unidades; ésas son medidas preventivas que pueden tomarse, pero que en la actualidad no están siendo adoptadas”, señaló Fletes. “Las personas que asaltan los buses son extremadamente peligrosas, van dispuestas a todo: a matar o morir”, finalizó.
Asaltos diarios
Carlos Andonie, presidente de la Asociación de Motoristas Profesionales de Honduras, Asomoproh, manifestó que más de 30 unidades de transporte público son asaltados semanalmente.
Dijo que las pérdidas son cuantiosas ya que los delincuentes despojan de sus pertenencias a los pasajeros y también les roban la tarifa a los conductores de las unidades. “El modo de operar es que los llevan a una calle solitaria y los despojan de todo, como dinero, celulares tanto a pasajeros como a motoristas”, señaló Andonie
Agregó que los asaltos a los buses se dan todos los días a tal grado que hasta se suscitan muertes. El transportista señaló que algunos homicidios que se han dado en los buses en algunas ocasiones son muertes por encargo. Tal es el caso de un hombre que viajaba en un bus rapidito que cubre la ruta San Pedro Sula- Aldea El Carmen, de quien la Policía dijo que fue una muerte por encargo por la forma en que fue ultimado, ya que el homicida y su víctima abordaron la unidad en el punto y al llegar a cierto lugar se pasó del asiento de atrás en el cual viajaba y le disparó en la cabeza a la víctima, identificada como Óscar René Cawell Ortiz.
Piden presencia policial
El director regional de Transporte, Orlando Molina, informó que a esta dependencia llegan a diario entre 17 y 20 denuncias de asaltos a unidades de transporte público. Señaló que los buses que cubren la ruta San Pedro Sula- Puerto Cortés son los más asaltados, por lo que piden mayor presencia policial en esa zona.
Molina recomendó para evitar tantos asaltos hacer patrullajes simultáneos entre Transporte y la Policía Preventiva, los cuales serían cada 500 metros. “Las patrullas de carretera ya están allí, aunque no están dando mucho resultado porque los asaltos se están dando en las zonas urbanas”, aseveró el funcionario.
Identificarán a motoristas
El subdirector de la Policía Nacional, René Maradiaga Panchamé, informó que el 15 de julio se reunirán con dirigentes de transporte, Policía, jueces y agentes del Ministerio Público para definir las estrategias para evitar los asaltos no sólo en el transporte de pasajeros, sino que también en el transporte pesado.
El jefe policial manifestó también que se efectuarán operativos sorpresas en los corredores y se exigirá la identificación de los motoristas, ayudantes y dirigentes de transporte.