Unas chispas de soldadura provocaron ayer un incendio en el histórico edificio Midence Soto ubicado frente al parque central.
Minutos de angustia y desesperación se vivieron ayer en el centro de la capital al desatarse el incendio en el conocido inmueble.
Al filo del mediodía, el fuego comenzó en el noveno piso, cubículo 920, que es utilizado como bodega de papelería y perfumería.
Según las investigaciones, el incendio se generó mientras unos hombres realizaban trabajos de soldadura. Al parecer las chispas se dispersaron y al entrar en contacto con la papelería que se encontraba en el lugar iniciaron las llamas que rápidamente se propagaron por el edificio.
El reducido espacio contribuyó a que el fuego se extendiera por todo el lugar. El humo se dispersó alrededor de cinco pisos, lo cual dificultó las labores del Cuerpo de Bomberos. Las personas que estaban en el edificio fueron evacuadas rápidamente, por lo que no se reportaron lesionados.
Siete unidades
Al sitio se desplazaron siete unidades contra incendios, entre grúas y camiones cisternas, así como ambulancias. La efectiva labor de los bomberos evitó el incendio afectara otros establecimientos del edificio.
Los bomberos corrían de un lado a otro a colocarse el lugar adecuado para protegerse de las llamas y el humo. Uno de los bomberos resultó afectado por el humo y tuvo que ser bajado en hombros por sus compañeros para brindarle los primeros auxilios en la parte baja del edificio.
Los curiosos se aglomeraban en los alrededores del escenario contraviniendo las recomendaciones de los policías. Éstos pedían a los peatones que se alejaran del lugar porque podía ser peligroso, pero las personas, haciendo caso omiso de la advertencia continuaban presenciando el espectáculo. Un joven se desmayó mientras presenciaba la labor del cuerpos de bomberos.
Controlan el fuego
Los propietarios de los negocios que operan en el edificio llegaron al lugar para constatar si sus bienes habían sido dañados, pero los bomberos no les permitieron el ingreso ya que el peligro continuaba por lo menos en los pisos 9 y 10.
'Al lugar donde se desató el incendio sólo se podía entrar con el equipo adecuado, como el oxígeno, debido a la gran cantidad de humo. Desde el quinto piso el acceso era muy complicado', relató Gloria Polanco, vocera del Cuerpo de Bomberos.
La Policía trató de evitar el paso a los peatones para evitar cualquier catástrofe que se pudiera dar.
Los vigilantes privados del edificio no permitían que los periodistas realizarán su trabajo, por lo que se dieron hasta empujones por tal acto.
A las tres de la tarde el fuego ya se había controlado. No se reportaron daños materiales.
A eso de las cinco de la tarde todo volvió a la normalidad en el centro de la ciudad.
