No pudieron darles un último abrazo a sus seres queridos antes de decirles adiós. En medio de dolor, rabia e impotencia, los familiares de cuatro de los cinco jóvenes desaparecidos, que fueron asesinados el viernes, tuvieron que conformarse con recibir sus cuerpos en una caja sellada.
Momentos de angustia y dramatismo vivieron los familiares de cuatro jóvenes asesinados de los cinco que fueron raptados cuando realizaban una mudanza el domingo anterior desde la residencial Honduras hasta la colonia Mirador de Oriente de la capital.
Los cadáveres fueron rescatados la tarde del sábado en un helicóptero de la Fuerza Aérea Hondureña (FAH) y trasladados a la base Hernán Acosta Mejía (HAM), y de allí a la morgue de Medicina Forense, donde se les practicó la autopsia.
Los cuerpos de los jóvenes encontrados en una montaña del municipio de Tatumbla, Francisco Morazán, fueron identificados como Roger Alberto Coleman y su esposa Annie Rachel Villatoro, además de Alejandro Enrique Aceituno y Kenneth Gabriel Cruz Banegas.
Mientras que el del quinto joven, Elvin Josías Izaguirre, fue hallado ayer en una aldea del municipio de Tatumbla por particulares. Lo más dramático y doloroso es que los cuerpos fueron entregados a los familiares en Medicina Forense en ataúdes sellados y de allí al cementerio para ser sepultados debido al avanzado estado de descomposición que fueron encontrados.
El primero en ser entregado fue el cadáver de Alejandro Enrique Aceituno. Posteriormente y de forma simultánea los de Roger Coleman y Annie Villatoro. Y por último el de Kenneth Gabriel Cruz Banegas, quienes fueron sepultados en el mismo cementerio ubicado al sur de la capital.
El rapto de los cinco jóvenes lo ejecutaron integrantes de la Pandilla 18, en medio de las operaciones de intervención que mantiene la Policía Nacional en las colonias consideradas “calientes”; entre ellas, Mirador de Oriente, por el alto nivel de inseguridad que se vive entre los pobladores.
Móvil
Lo preocupante es que las medidas implementadas por la Policía no han dado los resultados esperados para evitar los hechos criminales, que enlutan a las familias y al pueblo hondureño.
El viernes, las autoridades policiales anunciaron la captura de cinco integrantes de la Pandilla 18 en la aldea Cofradía de Tatumbla por estar implicados en el rapto de los cinco jóvenes.
Los detenidos fueron identificados como Carlos Humberto Sánchez García (24), José Arturo Hernández Rodríguez (30), Luis Alfredo Chirinos (34), Elba Dolores Irías (23) y Digna Raquel Juárez Salgado (20).
En cuanto al móvil del rapto y posterior asesinato de los jóvenes, las autoridades policiales manejan que los miembros de la Pandilla 18 habían desalojado al propietario de la casa a la que se mudaban las víctimas y que los pandilleros la querían para ellos.