Las autoridades judiciales condenaron este jueves a Daniel Alejandro Almendares Ordóñez a 96 años de prisión por su participación en la masacre ocurrida en julio de 2022, en la que murieron cuatro personas, entre ellas Said Omar Lobo Bonilla, hijo del expresidente Porfirio Lobo Sosa.
El fallo impone 22 años y seis meses de cárcel por cada uno de los cuatro asesinatos, sumando a 90 años, y otros seis años por el delito de asociación para delinquir.
Las víctimas del atentado fueron identificadas como José Salomón Vásquez Chávez, Norlan Enrique Rodríguez Rivera, Luis Armando Zelaya Rivera y Said Omar Lobo Bonilla.
Durante el juicio oral y público, el Ministerio Público presentó más de 33 medios de prueba, mientras que la defensa aportó siete elementos, entre documentales y testificales.
La Sala II del Tribunal de Sentencia con Competencia Nacional en Material de Criminalidad Organizada, Medio Ambiente y corrupción condenó a 96 años de prisión al cuarto involucrado en masacre donde falleció hijo de expresidente. pic.twitter.com/87iQNZgFS2
— Poder Judicial HN (@PJdeHonduras) August 14, 2025
Este caso forma parte de un mismo expediente judicial en el que, el 19 de junio de 2024, Ever Ezequiel Espinoza Martínez fue sentenciado también a 96 años de prisión por los mismos delitos. Además, Erick David Macías Rodríguez y Norma Alicia García recibieron condenas de 12 años y ocho meses de reclusión por encubrimiento de asesinato y asociación para delinquir.
El día de la masacre
Según los hechos probados, el ataque ocurrió el 14 de julio de 2022, alrededor de las 2:00 de la madrugada, en el estacionamiento de la Torre Centro Morazán.
Un vehículo tipo pick-up, color negro y sin placas, llegó al lugar con seis hombres armados y vestidos con uniformes similares a los de la Fuerza Nacional Anti Maras y Pandillas (FNAMP).
Los atacantes obligaron a las víctimas a bajar de sus vehículos, las registraron y las colocaron contra una pared, para luego dispararles repetidas veces antes de huir
